Según las fuentes, el sucesor de Nisman al frente de la Unidad Fiscal AMIA, Alberto Gentili, ordenó proteger este borrador en la caja fuerte de la Fiscalía.
Nisman quería forzar a Irán a extraditar a los acusados iraníes que tienen pedido de captura de Interpol, entre los que figura el excomandante de la Guardia Revolucionaria Mohsen Rezai y el exagregado cultural de la Embajada iraní en Buenos Aires Mohsen Rabbani.
Ante la negativa de Irán a las extradiciones, el Gobierno argentino rubricó en 2013 un memorándum de entendimiento con Irán que permitía tomar declaración en suelo iraní a los sospechosos de planificar el atentado contra la AMIA.
El memorándum nunca entró en vigor, pero dos años después de su firma el fiscal especial de la AMIA lo señaló como el principal instrumento de un supuesto acuerdo orquestado por la presidenta argentina, Cristina Fernández, para encubrir a los sospechosos iraníes.
Junto a la mandataria, Nisman denunció también al canciller, Héctor Timerman, y a otros funcionarios kirchneristas.
El pasado 18 de enero, cuatro días después de presentar la denuncia con Cristina Fernández, el fiscal fue hallado muerto de un tiro en la cabeza en su casa de Buenos Aires, en circunstancias aún sin aclarar.
El fiscal Gerardo Pollicita, a cargo de la causa por presunto encubrimiento, solicitó hace diez días la imputación de todos los acusados por Nisman, pedido que el juez Daniel Rafecas debe resolver esta semana.
