El menor tomó un arma que encontró en el taller mecánico donde su padre trabajaba y dijo que solo intentaba imitar lo que jugaba en el video juego, según constataron medios de la localidad.
El padre, al escuchar el disparo, dejó un auto que se encontraba reparando y corrió a ver que ocurría. Ahí encontró a su hija tendida en el piso sin vida. La intentó llevar a un centro asistencial, pero ya no fue posible hacer nada al respecto.
El parte policial da cuenta de que el arma era un revólver calibre 38.
El horroroso hecho despertó preocupación por los efectos adversos que pueden derivarse del uso de la tecnología en la niñez y adolescencia si no hay una buena educación de por medio.
De momento, las autoridades continúan investigando el incidente.