Según la publicación, los estadounidenses con frecuencia van a Tijuana, Baja California, a efectuarse cirugías estéticas por un mejor precio; sin embargo, autoridades y médicos advierten del peligro de ofertas en lugares no autorizados.
“En 2019, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades emitieron una advertencia después de que 11 estadounidenses que se sometieron a cirugías de pérdida de peso en la ciudad fronteriza regresaron a casa con infecciones resistentes a los antibióticos”, dice el artículo de The Tribune.
Keuana Weaver, de Long Beach, es la víctima mortal, y había confiado a su familia que pensaba efectuarse “un trabajito”, pero, a finales de enero último, una llamada les sorprendió: un pariente les indicó que la mujer de 38 años había fallecido en Tijuana en la mesa de cirugía estética.
La familia pide que se investigue el hecho, que dejó en la orfandad a dos niños de 1 y 13 años.
“La causa de la muerte de Weaver fue una encefalopatía hipóxica secundaria, que se refiere a los daños sufridos por el sistema nervioso central debido a un suministro inadecuado de oxígeno y sangre”, dice el artículo.
La única respuesta que recibieron de la clínica, ubicada en la colonia Aviación, Tijuana, es que les reembolsarían US$6 mil 700, que fue el costo de la cirugía.
Kanisha Davis, la amiga de Weaver, y quien también salió afectada, confirmó que programaron la cita para efectuarse una liposucción y una abdominoplastia.
Contó que las condiciones en que fueron intervenidas fueron terribles y que ella también casi muere desangrada más tarde.
Las autoridades locales dijeron que estos y otros casos están bajo investigación.