Una mujer “murió ayer y otra hoy” en el este del país, precisó el ministro de Salud, Wael Bu Faur.
Antes había anunciado “el estado de alerta” y pedido “a las personas que sufren de asma, alergias y enfermedades cardiovasculares y pulmonares crónicas, así como a los ancianos, niños y mujeres embarazadas que permanezcan en casa, eviten el polvo (…) y se pongan mascarilla” .
Según el servicio meteorológico, la tormenta perderá intensidad a partir del miércoles por la noche.
El viento de arena ardiente que sopla en la región es un fenómeno que suele darse en Líbano “pero durante la primavera, en marzo y en abril” , explicó el secretario general del Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNRS) en Líbano, Muin Hamzé.
La tormenta complica todavía más la vida a los refugiados sirios en campamentos de la región semidesértica de la Bekaa, pero de momento no ha afectado al tráfico aéreo en el aeropuerto internacional de Beirut.
En la vecina Siria, un país en guerra desde hace más de cuatro años, la tormenta azota varias provincias, sobre todo la de Homs (centro) , Alepo (norte) , Latakia (oeste) y Deir Ezor y Deraa, estas dos últimas en el sur, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) , una ONG con sede en Gran Bretaña y una red de fuentes en el país.
Decenas de civiles padecen asfixia, añadió.
En Mayadin, una ciudad del este de Siria controlada por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) , los hospitales no pueden recibir a más pacientes por falta de botellas de oxígeno, según el OSDH.
El ministerio de Salud sirio informó, por su parte, que “cientos de ciudadanos que padecen asma y bronquitis acudieron a clínicas para ser atendidos” .
