Los cientos de migrantes de países como Colombia, Venezuela y Nicaragua mostraron su solidaridad con el pueblo de México y en una reunión convocada por la organización Pueblo Sin Fronteras se mostraron listos para viajar a las zonas destruidas y ofrecieron “su mano de obra, esfuerzo, voluntad y fe”.
Entre los migrantes hay albañiles, maestros de obra, técnicos, soldadores, mecánicos y campesinos que, dijeron, pueden ser útiles en estos momentos para el pueblo de Guerrero, que ha sufrido los embates del huracán que dejó pérdidas humanas y materiales.
El ofrecimiento llegó en medio de una intensa lluvia en Tapachula provocada por una depresión tropical formada la tarde del sábado en el Pacífico. Por la noche los migrantes cumplieron una vigilia con oraciones, veladoras y cartulinas para solidarizarse con los habitantes del estado de Guerrero.
Los migrantes llevaron a cabo una especie de registro para enlistarse y esperar la decisión del Gobierno mexicano de si acepta trasladarlos desde Tapachula al estado de Guerrero para empezar a trabajar.
La migrante de Guatemala Yuris Yosaira Pastrano, quien se encuentra en Tapachula, dijo que ante la oportunidad de salir para ir a Acapulco está dispuesta a ir a trabajar y ayudar al pueblo de México a reconstruir o lo que los pongan a hacer.
“Hay que ir a trabajar y apoyar a Acapulco, está la oportunidad y vamos a apoyarlos, a solidarizarnos, a ayudarlos, porque sinceramente aquí no estamos haciendo nada, mientras ellos necesitan nuestra ayuda, lo que nos pongan a construir, limpiar, exactamente una ayuda, estamos dispuestos hacerlo”, expuso a Efe
La mujer, quien era comerciante en Honduras, pidió al Gobierno mexicano que les brinde lo necesario: Comida, un techo y un documento para poder estar en ese estado de manera momentánea y después seguir adelante en su camino a Estados Unidos.
En tanto, Gerson Linares, migrante de Guatemala, que se encuentra en Tapachula en espera de salir en caravana el lunes, señaló que puede sumarse al grupo de migrantes dispuestos ayudar en el estado de Guerrero.
Linares cambió momentáneamente su idea de ir a la frontera norte para poder ayudar porque recordó que en su país han sucedido esos desastres en varias ocasiones.
“Tenemos que ayudar, está muy afectado Acapulco y en mi país también ha pasado esto y hemos recibido ayuda y la diferencia es que somos de diferente nacionalidad, pero nosotros estamos dispuestos a apoyarlos a ellos. Hay niños y personas sufriendo, nosotros somos personas humildes, estamos sufriendo y necesitamos la oportunidad. Vamos en la caravana, pero tenemos la fuerza para ir a ayudar”, expresó.