Atención a los ojos
El oeste y el norte de Europa, el oeste de frica del Norte, frica Occidental, Canadá, el este de Norteamérica y una gran parte de América Latina serán las mejores zonas para ver el tránsito de Mercurio, siempre y cuando las condiciones meteorológicas sean favorables.
Sin embargo, hay que ser prudentes y respetar las normas de seguridad, pues observar el sol directamente sin medidas de protección puede provocar lesiones oculares irremediables.
Las gafas especiales para ver eclipses no servirán de nada, pues el planeta es demasiado pequeño.
“Es necesario un instrumento astronómico para agrandar la imagen del sol”, explicó Pascal Descamps.
Los aficionados a la astronomía podrán utilizar gafas y telescopios si los protegen con los filtros solares adecuados.
Según Descamps, “el medio más simple para ver Mercurio sin riesgo será utilizando un solarscope”, una especie de caja de cartón con un objetivo equipado con una lentilla y un pequeño espejo convexo. Este permite observar sin peligro el Sol a través de la proyección de su imagen invertida en una pantalla.
Mercurio, cuya temperatura en superficie varía entre los -173ºC y los 427ºC, ha sido observado por dos sondas espaciales estadounidenses, la Mariner 10 en 1974 y la Messenger en 1975, cuya misión finalizó en el 2015.
Europa y Japón lanzarán dos sondas en el 2018 en el marco de la misión BepiColombo, que alcanzará Mercurio en 2024.