La Organización Fraternal Negra de Honduras (Ofraneh) dijo en un comunicado que García, de 39 años, murió “en medio de un violento desalojo perpetrado por elementos de las fuerza de seguridad”, que también “han montado un operativo para la capturar al compañero Sotero Solano”.
Una fuente cerca a los campesinos dijo que García murió de al menos cuatro balazos en el rostro pero que no sabían si le dispararon los policías que practicaron el desalojo.
La Red Nacional de Defensores, a través de otro comunicado, informó que unas 150 familias fueron desalojadas por 10 patrullas de policías y dos tanquetas instaladas en los predios de Río Chiquito, municipio de Río Lindo.
“Sabemos que en las luchas del Copinh siempre van a haber amenazas e intimidación”, lamentó Reyes.
El 3 de marzo desconocidos entraron a la vivienda de Cáceres, coordinadora del Copinh, en La Esperanza, y la asesinaron a balazos e hirieron de bala al activista mexicano Gustavo Castro.
Cáceres emprendía una lucha en defensa de los campesinos y de los indígenas lencas contra una compañía que pretende construir una represa en un río que cruza en medio de las comunidades étnicas.
Cientos de indígenas y afrodescendientes se organizaban el martes para movilizarse el jueves en una peregrinación, desde sus comunidades hacia Tegucigalpa, para exigir castigo para los asesinos de Cáceres, según diferentes organizaciones.
Más violencia
Un sobrino del diputado opositor hondureño Rafael Alegría resultó herido de bala el martes en un atentado que sufrió en Tegucigalpa en las inmediaciones de la organización no gubernamental Vía Campesina, informaron fuentes oficiales.
El joven herido es Christian Mauricio Alegría, quien trabaja en el departamento de contabilidad de Vía Campesina y cuya edad no fue precisada, dijo a periodistas un agente policial, que habló a través de la radio y no fue identificado.
El sobrino de Alegría, representante del departamento de Francisco Morazán por el Partido Libertad y Refundación (Libre, izquierda) , fue interceptado por hombres armados al llegar a Vía Campesina, ubicada en la colonia Alameda de Tegucigalpa, señaló.
Christian Mauricio fue trasladado a un centro asistencia de Tegucigalpa, donde recibe asistencia médica, aunque no ahondó sobre la gravedad de sus lesiones.
El agente policial no precisó detalles del atentado criminal del martes en Tegucigalpa.
Luego de conocer la noticia, el diputado hondureño condenó el atentado y calificó el hecho como “una forma de represión contra Vía Campesina, su personal y su sede”.
En declaraciones a periodistas, señaló que la organización ha sido atacada en “varias ocasiones” y denunció que existe “un plan de ataque para intimidar” a esa entidad.
La violencia criminal en Honduras deja un promedio diario de trece muertos, según registros de la Secretaría de Seguridad.