A más de una semana de esta masacre, continúa surgiendo información sobre el día del tiroteo y las autoridades locales siguen investigando a detalle lo sucedido en la escuela primaria de Uvalde.
En esta ocasión, la policía estatal informó que una puerta exterior de la escuela primaria Robb fue abierta por una profesora antes de que Salvador Ramos, autor del ataque, ingresara por este acceso y matara a 21 personas.
Sin embargo, las autoridades indicaron que, a pesar de posteriormente haber obstruido esta puerta, no se cerró con seguro y hasta el momento se encuentran realizando investigaciones para averiguar los motivos de este mal funcionamiento.
Al principio de la investigación, la policía estableció que una maestra, cuya identidad sigue siendo desconocida, había dejado la puerta abierta minutos antes de que el asesino ingresara a las instalaciones del centro educativo.
No obstante, las nuevas investigaciones indicaron que la profesora mantuvo abierta la puerta de acceso, por donde ingresó Ramos, con la ayuda de una piedra, pero luego la quitó y cerró por completo el acceso cuando se dio cuenta de los disparos del asesino.
Esta puerta, a pesar de tener un mecanismo de bloqueo automático, no corrió el seguro a la hora de cerrarse, informó Travis Considine, jefe de comunicación del Departamento de Seguridad Pública de Texas.
“Verificamos que ella cerró la puerta. No se corrió el seguro. Eso es lo que sabemos y ahora los investigadores están averiguando por qué no se cerró con seguro”, indicó.
Asimismo, Considine confirmó que la maestra inicialmente dejó la puerta abierta con la ayuda de una piedra, pero posteriormente la cerró para ingresar a la escuela y llamar al 911 para alertar del ataque de Ramos.
“Volvió a salir mientras hablaba por teléfono, oyó que alguien gritó: ‘¡Tiene un arma!’, lo vio saltar la cerca y que tenía un arma, así que volvió a entrar corriendo”, confesó.
Por su parte, Steve McCraw, el jefe del Departamento de Seguridad Pública, indicó que se desconoce el motivo por el que la profesora abrió por primera vez la puerta y la aseguró con una piedra, situación que dio inicio a una profunda investigación.
Ante esta duda, Don Flanary, abogado de San Antonio, reveló que la empleada de la escuela primaria Rob abrió la puerta en primera instancia para llevar comida de un carro hacia uno de los salones de clase, pero inmediatamente la cerró cuando se dio cuenta del peligro.
“Cuando volvió a entrar, apartó la piedra de una patada. Recuerda haber cerrado la puerta mientras decía al 911 que (el atacante) estaba disparando. Ella pensó que se pondría el seguro de la puerta porque se supone que esa puerta siempre tiene el seguro puesto”, dijo Flanary.