Esta zona tiene cien kilómetros de diámetro y, según este experto, se ha visto que la tripulación puede llegar a Marte por un punto, pero establecerse en otro y hacer ciencia en varios, además de tener un vehículo que transporte a los científicos alrededor para sacar muestras y traerlas luego a tierra.
Los investigadores localizaron más de 50 posibles puntos para poder hacer todo esto.
En los próximos años hay que intentar reducir este número y seleccionar los 10 mejores sitios y “concentrarse” en ellos, según Green, quien impartió ayer una conferencia sobre Plutón organizada por el Planetario de Madrid y la Obra Social “la Caixa”.
La intención, continúa, es hacer varios sobrevuelos al planeta en la década de 2030 y aterrizar también en una de sus lunas, y a partir del 2040 les gustaría que una tripulación tocara suelo.
A su juicio, la tecnología ya existe, pero aún hay que desarrollar algunas cosas y probarlas.
En este sentido, Green recuerda que para establecer una base en Marte habría que transportar grandes cantidades de material (hasta 40 toneladas), por lo que para ello hay que implementar motores específicos y quizás en su momento hacer la descarga en varias fases.
Green fue consultor de la película “The Martian” (Ridley Scott) y apunta: “Lo que se ve, el hábitat, el vehículo, es lo que estamos desarrollando ahora”.
Este experto asegura que se la pasó muy bien trabajando para el equipo de rodaje y que volvería a hacerlo, pero tiene que ser la película adecuada y esta lo es, recalca, porque es “lo más parecido a hechos científicos, aunque siga siendo ciencia ficción”.
“Es como con Julio Verne y su 20 mil leguas de viaje submarino, donde nos enseñó un mundo apasionante de los océanos cuando aún los humanos no podían ir. Esta película es un poco lo mismo, es lo que está a la vuelta de la esquina, es algo en lo que ya nos podemos ver”.
Para este experto de la Nasa, la ciencia ficción es muy importante para los humanos y cultura porque nos permite soñar: “si no podemos soñar sobre nuestro futuro nunca llegaremos a vivirlo”.
Pruebas de agua
En cuanto a la existencia de agua líquida en el planeta rojo, dice que ya hay pruebas suficientes para afirmarlo.
Hace un mes y medio la Nasa publicó un estudio basado en el análisis pormenorizado de las imágenes obtenidas por la sonda Mars Reconnaissance Orbiter. Con su espectómetro se detectaron signos de minerales hidratados en montañas marcianas en las que se perciben unas rayas.
Esas rayas, que aparecen por temporadas en la superficie corresponden a agua salobre. Ahora hay que saber de dónde viene.
Una de las teorías que “más gusta”, según Green, es que Marte podría ocultar bajo su superficie un depósito de agua o hielo: si tiene agua, podría tener una vida microbiana y “esto es apasionante”. Hay que investigar más, pero “nos estamos acercando”.
40 tonealdas de material hay que transportar a Marte antes de establecer misión.
Sobre Plutón, opina, es un “mundo maravilloso”, done creían que iba a tener muchísimos cráteres, como la Luna, pero fue una “gran sorpresa” descubrir que no. Es muy activo con enormes glaciares, que se han ido moviendo recubriendo la superficie y eliminando cualquier rastro de cráteres; los hay, pero algunas regiones no tienen ni uno.
“Sabemos muchas más cosas, como que su atmósfera es muy activa”, y en cuanto a si Plutón debe seguir clasificado como planeta enano asegura: “la Nasa no se mete en la denominación de los planetas. A mí no me importa cómo se llame, es un cuerpo importante para entender nuestro sistema solar” .