Cerca de medio millar de partidarios de Lula, vistiendo camisetas rojas y agitando banderas del izquierdista Partido de los Trabajadores (PT) gritaba en su apoyo. A pocos metros, un grupo un poco menos numeroso gritaba “¡Fuera Lula, fuera PT!” , constató un fotógrafo de la AFP .
Los ánimos se caldearon rápidamente con gritos y hasta golpes. La policía intervino con gases lacrimógenos y enfrentamientos cuerpo a cuerpo para separar a los bandos de manifestantes, que llegaron a bloquear el tránsito y algunos de los cuales resultaron heridos.
Imágenes de la televisora Globo mostraron a policías golpeando fuertemente a algunos manifestantes.
Este caso y otras investigaciones judiciales que tienen a Lula como blanco amenazan su eventual candidatura a la presidencia en el 2018. El exmandatario niega las acusaciones y asegura que es víctima de un complot para desprestigiarlo antes de los comicios.
Algunos manifestantes pro Lula lanzaron piedras y palos contra el gran muñeco inflable “Pixuleco” que representa al exobrero metalúrgico vestido de presidiario y que opositores cargan consigo en todas las manifestaciones contra el gobierno. Finalmente consiguieron derribarlo.
Interrogatorio suspendido
Cerca de la medianoche del martes, una medida cautelar suspendió la declaración que Lula debía prestar ante la fiscalía del estado de Sao Paulo, que investiga al expresidente y su esposa Marisa por “lavado de dinero que incluye el delito de ocultamiento de patrimonio” .
El Consejo Nacional del Ministerio Público (CNMP) , encargado de supervisar a los fiscales, canceló la convocatoria a petición de un diputado del PT que cuestionó al fiscal encargado del caso, Cassio Conserino. Este declaró a la prensa que habría “indicios” para acusar a Lula cuando el proceso está recién en fase de recopilación de pruebas.
La solicitud de dejar sin efecto la convocatoria a Lula, que es investigado por presunta corrupción en otras causas, también señala que el proceso fue “encaminado” a un fiscal, algo vedado por las reglas procesales en Brasil.
La resolución que suspendió su declaración judicial deberá ser ratificada o descartada por el plenario del Consejo, “probablemente la semana próxima” , dijo este miércoles a la AFP una fuente del organismo.
En una rueda de prensa, Conserino declaró este miércoles que llevará documentos al Consejo para revertir la suspensión del interrogatorio de Lula, a fin de “cumplir con el objetivo de indagar los graves hechos que involucran personas que se consideran encima y al margen de la ley” .
La fiscalía sospecha que el apartamento tríplex en Guarujá pertenece a Lula aunque oficialmente aparece como posesión de la constructora OAS, una de las firmas involucradas en el megafraude a Petrobras que es investigado por la operación Lava Jato.
Lula declaró en 2006 haber pagado una cuota para este proyecto inmobiliario en la Bancoop, la cooperativa de bancarios que era propietaria de esta obra, y que finalmente, por inviabilidad, fue transferida a OAS. La defensa del expresidente afirma que Lula finalmente desistió de la compra y pidió la devolución del pago.
En paralelo, investigadores del caso Lava Jato que intenta desmadejar el fraude en Petrobras sospechan que OAS habría entregado apartamentos del mismo desarrollo inmobiliario en Guarujá en pago de sobornos a cambio de contratos con la petrolera.
Lula recibió en la sede del Instituto que lleva su nombre y que lo representa a una delegación de diputados del PT que fueron a brindarle su apoyo. Consultado por la AFP , un portavoz del instituto dijo que no se esperaban declaraciones del expresidente durante la jornada.