“No a las privatizaciones, salvemos a los puertos, la DEI (compañía nacional de electricidad), los hospitales”, pedían los manifestantes en una banderola. El sindicato de empleados públicos exigía en una pancarta que se “borre la deuda” .
El gobierno de Alexis Tsipras, que espera obtener en unas semanas un tercer plan de ayuda de al menos 80.000 millones de euros, presentó el martes por la noche el proyecto de ley que debería ser votado este mismo miércoles, según los términos del acuerdo firmado el lunes por la mañana en Bruselas.
El texto prevé medidas como la subida del IVA y la adopción de una regla de oro presupuestaria.
En una entrevista televisada el martes por la noche, Tsipras explicó las razones que lo habían empujado a firmar, en un clima de gran tensión, el documento que refuerza la austeridad rechazada por los griegos en el referéndum del 5 de julio.
“Asumo mis responsabilidades por todo error que haya podido cometer” , declaró. “Asumo la responsabilidad de un texto en el que no creo pero que he firmado para evitar un desastre para el país” , dijo en alusión a la situaciones como una hipotética salida del euro.