El bebé estaba desaparecido luego de que el tornado arrebatara el portabebés de las manos de su madre. González añadió que cuatro personas, todas de la misma familia, aún están perdidas un día después del tornado que dejó también al menos 300 heridos y daños en unas 200 casas.
El tornado lanzó autos a techos de casas de un piso.
El tornado sorprendió a los pobladores de zonas pobres de Ciudad Acuña, una localidad de 136 mil habitantes, la mañana del lunes reciénpasado haciendo volar por los aires camiones, postes completos de luz, y automóviles que quedaron postrados sobre los techos de pequeñas casas financiadas por el servicio social mexicano.
El paso del fenómeno climático duró apenas 6 segundos pero bastó para causar lesiones a 286 personas, de las cuales 44 fueron hospitalizadas, detalló Martínez en entrevista telefónica.
“Hay 750 viviendas afectadas, pero será este martes cuando sepamos el grado de daños”, prosiguió el funcionario.
Ante la tragedia, el departamento de Protección Civil estatal habilitó ocho refugios temporales, pero sólo 48 personas están durmiendo en ellos.
“La mayoría de la gente afectada recurrió a sus familiares. El resto de la gente sólo acude a los refugios para comer” , apuntó Martínez.
El tornado azotó al menos siete barrios de la ciudad con una velocidad de 270 a 300 km/h, generado por el efecto de la combinación de un frente frío y una masa de aire caliente proveniente del océano Atlántico.
La mayoría de esos barrios están habitados por obreros que trabajan en maquiladoras (fábricas manufactureras) , comentó a la AFP José Manuel Rodríguez, gerente del hotel La Finca.
“El tornado pasó desafortunadamente por la zona más pobre de Acuña. Toda esa gente trabaja en las maquiladoras, y viven en casitas (…) muy frágiles, aquí les llamamos huevos de chorizo porque apenas cabe la camita, una salita. Están construidas con materiales muy baratos, son casas muy endebles” , expuso el ejecutivo.
Rodríguez aseguró que el tornado no afectó a la zona hotelera de Ciudad Acuña, vecina de la estadounidense Del Río (Texas, sur) .
Del lado estadounidense, lluvias que acompañaron al tornado se extendieron el lunes recién pasado a Texas y Oklahoma, donde al menos tres personas murieron por inundaciones.
– Casa arrastrada por la corriente –
“Hay vehículos esparcidos por toda la ciudad” , agregó Parker durante una conferencia de prensa, y precisó que los servicios de socorro verificaban si dentro de los automóviles no había quedado alguien atrapado.
“Le aseguré al gobernador (Greg) Abbott que podrá contar con la ayuda del gobierno federal” , indicó por su parte el presidente Barack Obama.
“Ya tenemos personal de la agencia a cargo de las catástrofes en el lugar, están coordinando con las autoridades de Texas que gestionan las emergencias y me imagino que habrá importantes demandas a Washington. Le prometí que responderíamos a todos esos pedidos” , agregó el mandatario.
Por lo demás, alrededor de 200 espectadores que asistieron el lunes de noche al partido de básquet entre los Houston Rockets y los Golden State Warriors se tuvieron que quedar en el gran estadio en el que se desarrolló ese juego de la final de la conferencia oeste de la NBA.
El centro de la ciudad, donde se encuentra el Toyota Center, no quedó demasiado inundado, precisó Parker, pero esos espectadores no pudieron volver a sus casas después del encuentro a raíz del diluvio.
“Lluvias torrenciales cayeron poco antes del final del partido y se le pidió a muchos asistentes que se quedaran en el estadio hasta que la lluvia se calmara” , precisó Parker.
Imágenes de cadenas de televisión locales mostraban vehículos abandonados en calles inundadas, a veces con sus conductores en su interior.
Por otro lado, aumentaban los temores en el condado de Hays, también en Texas, donde las autoridades reportaban como desaparecidas a una docena de personas.
Muchas de ellas se encontraban en una casa construida sobre pilotes, que fueron arrastrados por la corriente el sábado de noche. En dicha casa estaban reunidas dos familias a causa del fin de semana largo del Memorial Day en Estados Unidos.
Allí se encontraba Laura McComb, quien estaba hablando por teléfono con su hermana cuando la casa fue arrastrada por las aguas: “Ahora estamos en una casa que flota sobre el río. Llama a papá y mamá. Te quiero. Y reza” , le dijo a su hermana según una cadena de televisión local.
Los ocupantes de la vivienda, entre ellos varios niños, siguen desaparecidos desde el sábado.
Las autoridades confirmaron la muerte de una persona en Texas y de otras dos en Oklahoma, estado situado al norte de Texas.