Los funcionarios de Aduanas y los agentes de Policía registraron durante tres horas su casa y posteriormente estuvieron otras cuatro horas más en su despacho en busca de pruebas.
Concluido el último registro de su oficina, en el que los agentes sacaron una veintena de cajas con documentación, Rato regresó a su casa, previsiblemente en libertad después de que la Fiscalía de Madrid hubiera pedido al juez de instrucción de Madrid que levantara su detención cuando concluyeran los registros.