Esta ha sido la respuesta más dura de momento a las declaraciones realizadas por el ministro de Defensa israelí, Moshé Yalón, la semana pasada en las que manifestó que si su país no tiene “una respuesta a través de operaciones quirúrgicas” para detener el programa nuclear iraní, podrían tomar “ciertos pasos” como los realizados por los EE.UU. en “Nagasaki e Hiroshima” .
Estas palabras, en las que según Irán Israel reconoce implícitamente el tener armas nucleares y estar dispuesto a emplearlas contra Irán, llevaron al país asiático a presentar una denuncia ante las Naciones Unidas y a endurecer su discurso militar.
“Si los sionistas hacen algún movimiento tonto, arruinaremos Haifa y Tel Aviv. Los sionistas tienen muchos problemas y saben que Irán es demasiado poderoso para que puedan dominarlo” , añadió Safavi.
El asistente del líder, indicó que la respuesta iraní no solo caerá sobre el “régimen sionista” , sino sobre “cualquier otro agresor que intente actuar contra nosotros” .
En otras declaraciones del mismo tenor publicadas hoy, el comandante de la Guardia Revolucionaria iraní, Alí Jafarí, subrayó que los “enemigos de la nación iraní” lo que mejor entienden es “el lenguaje de la fuerza y las armas” , y que su país está dispuesto a enfrentarlos “con la misma lengua” .
“La opción militar de la que los occidentales hablan constantemente es ridícula y saben que si hubiera podido dar un resultado la habrían empleado ya muchas veces. Por eso ahora han cambiado su foco a otros tipos de amenaza y hacia las guerras de baja intensidad” , dijo.
-Polémico programa nuclear-
Irán y los países del Grupo 5+1 (EE.UU., China, Francia, Reino Unido, Rusia y Alemania) negocian un acuerdo sobre el polémico programa nuclear iraní que ponga fin a las sanciones que lastran la economía del país a cambio de garantías para que éste no pueda desviarse a fines militares.
Según han indicado todos los negociadores, el acuerdo avanza y es posible llegar a una solución antes del plazo acordado por las partes.
Sin embargo, Irán y EE.UU. no han cejado de presionarse mutuamente por este tema, lo que ha incluido afirmaciones por parte de Washington de que la “opción militar” aún sigue sobre la mesa en caso de que Teherán no acepte un pacto nuclear.
Teherán, si bien ha considerado públicamente esta postura estadounidenses como parte de una retórica diseñada para su mercado interno y para tranquilizar al “régimen sionista”, como habitualmente se refiere a Israel, también ha advertido que no negociará “bajo la sombra de las amenazas” y que nunca aceptará un pacto nuclear que rompa con las líneas rojas que se trazó al principio de las negociaciones.