“El virus del Zika provoca lesiones en el cerebro y esto refuerza la relación con la microcefalia” en fetos, señaló la especialista, que integra el equipo responsable del primer hallazgo del virus en líquido amniótico.
Brasil enfrenta una epidemia del virus que es transmitido por el mosquito Aedes Aegypti y que disparó los casos de microcefalia, una malformación congénita que reduce el tamaño del cráneo y deja secuelas intelectuales y motoras irreversibles.
La estimación oficial es que alrededor de un millón y medio de personas fueron contagiadas en Brasil con virus del Zika, hasta ahora considerada una dolencia suave que causaba una fiebre leve y dolor en las articulaciones. Según los especialistas, en el 80% de los casos es asintomática.
“Recibimos las muestras de tejido cerebral de la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz). Son las mismas que fueron enviadas a Estados Unidos, donde investigadores del CDC (Centers for Disease Control and Prevention, que depende del Departamento de Salud) arribaron a la misma conclusión: la presencia de virus del Zika en cerebros de fetos” , añadió.
Diez días atrás, Fiocruz anunció que había detectado al virus en muestras de orina y de saliva, aunque dijo no contar con elementos para probar que pudiera ser transmitido por esas vías.
Los últimos datos oficiales muestran que Brasil registró 462 casos de microcefalia entre octubre del 2015 y febrero del 2016, contra una media anual de 150. Otros tres mil 852 fueron notificados y están en estudio.