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La organización exige a las autoridades migratorias que prohiban ese tipo de acciones y demanda que la división de Tucson, Arizona, se pronuncie y sancione a los agentes implicados.
“Esto demuestra una práctica rutinaria de destrucción de los suministros de ayuda. No Más Muertes exige que se ponga fin de inmediato a la destrucción y la confiscación de suministros de ayuda humanitaria. No se ha tomado ninguna medida disciplinaria en contra de ningún agente”, dice el comunicado.
Los restos de unas siete mil personas han sido hallados durante las últimas dos décadas en regiones fronterizas, y
Durante el periodo del estudio (de marzo del 2012 a diciembre del 2015) la Oficina del Médico Forense en el condado Pima reportó el descubrimiento de 593 personas muertas sólo en la frontera de Arizona.
“Es inhumano que intencionadamente estén derramando el agua que podría salvar la vida de una persona”, dijo a la agencia Efe John Washington, voluntario de No Más Muertes.
No Más Muertes tiene en su página de Facebook una sugerencia para denunciar y hacer presión a las autoridades de EE. UU. para que frenen este tipo de acciones.
