Algunos testigos han señalado que en la discoteca Colectiv, en la que se estaba celebrando un concierto cuando ocurrió la tragedia, no había salidas de incendio y que se usaban materiales inflamables para insonorizar.
El local no tenía permiso para organizar conciertos. Fue durante un recital cuando un artefacto pirotécnico lanzó chispas sobre la almohadilla de protección de un pilar, que comenzó a arder.
Las autoridades temen que el número de muertos pueda aumentar, ya que una treintena de los heridos se encuentran en estado grave.
Además de presentar graves quemaduras, muchos de ellos han sufrido lesiones provocadas por la avalancha humana y otros inhalaron gases tóxicos.
El número de víctimas mortales se elevó este lunes a 31 al fallecer un paciente que estaba ingresado en la unidad de quemados de un hospital, según anunció el ministro del Interior, Gabriel Oprea.