Según señala hoy el diario británico “The Guardian”, pese a que los medios turcos han hablado de la posibilidad de que la muerte de Sutton haya sido un suicidio, los colegas de la británica consideran poco probable esa posibilidad y han pedido que se abra una investigación sobre las circunstancias de su muerte.
Sutton, que hablaba cinco idiomas, entre ellos el árabe, trabajaba como directora para Irak en funciones del “Institute of War and Peace Reporting” (Instituto de coberturas informativas de guerra y paz), con sede en Londres, que respalda el periodismo local en países afectados por conflictos y crisis.
“The Guardian” resalta que la persona que ocupaba anteriormente ese mismo cargo, Ammar Al Shahbander, fue asesinada en un atentado con coche bomba en Bagdad el pasado 2 de mayo.
Tras haber perdido el citado avión a Irak, la mujer preguntó a los empleados del aeropuerto acerca de una solución alternativa, ante lo que estos le indicaron que debería comprar un nuevo billete, pues la compañía no era responsable de la pérdida del vuelo.
Después de explicar que no disponía de dinero y de llorar brevemente ante el mostrador de atención al cliente, según los medios turcos, la pasajera se dirigió a los servicios, donde posteriormente aparecería colgada de los cordones de los zapatos de un gancho, en la puerta de uno de los aseos.