Gelacio Navarrete Morales, quien impartía un taller de talabatería en la normal de Ayotzinapa, fue atacado en la mañana por hombres armados, quienes lo privaron de su libertad para luego “entregarlo a un grupo de delincuentes”, dijo en conferencia de prensa Xavier Olea, fiscal de Guerrero.
El maestro fue atacado en pleno centro de la ciudad de Tixtla y ante la mirada de varias personas e incluso de algunos policías municipales.
Luego de una llamada anónima, el cuerpo fue hallado en una barranca localizada cerca de un carretera.
Guerrero, uno de los estados más empobrecidos del país y punto clave para la siembra y tráfico de marihuana y goma de opio, es escenario de violentas disputas entre narcotraficantes.
La noche del 26 de septiembre del 2014, 43 estudiantes de Ayotzinapa fueron atacados por policías corruptos de Iguala, quienes los habrían entregado a miembros del cartel Guerreros Unidos.
Los criminales los habrían asesinado e incinerado en un basurero del vecino poblado de Cocula, para luego arrojar los restos a un río, según la versión de la fiscalía
El caso de Ayotzinapa ha desatado fuertes críticas contra el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto y las investigaciones del caso han sido cuestionadas por el grupo de expertos que envió a México la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.