Ese hecho se produjo el 1 de noviembre después del empate que Atlético Nacional logró ante Cerro Porteño en el estadio Defensores del Chaco, de Asunción.
Sol de Pando publicó fotografías donde aparecen jugadores de Atlético Nacional junto con el empresario venezolano Ricardo Albacete, el dueño del avión.
El semanario boliviano sostiene que Albacete “se negó a hacer el depósito para pagar esa compra de combustible, por lo cual los mismos jugadores del equipo colombiano a bordo efectuaron una colecta para recaudar los US$3 mil que era el precio de ese combustible adicional”.
Coincidencia
El mismo avión el pasado 28 de noviembre se precipitó a tierra con la delegación del club brasileño Chapacoense, con un saldo de 71 muertos y seis supervivientes (cuatro brasileños y dos bolivianos).
El semanario Sol de Pando sostiene que Albacete “presionaba permanentemente a los pilotos bolivianos para volar con el tanque a límite de su capacidad y sin posibilidades de reabastecimiento de combustible, ya que el empresario venezolano, como único dueño oficial del avión, era el responsable de cubrir ese costo y se negaba a pagarlo”.
La Aeronáutica Civil (Aerocivil) de Colombia presentó el lunes un informe preliminar que establece que el exceso de peso y la falta de combustible provocaron el accidente del avión de LaMia hace un mes en territorio colombiano.
Chapecoense viajaba a Medellín para disputar el 30 de noviembre frente al Atlético Nacional el primer partido por la final de la Copa Sudamericana, torneo que le fue adjudicado como un homenaje por la Confederación Sudamericana de Fútbol.
También se supo que LaMia cobraba unos US$100 mil por los vuelos chárter a equipos de fútbol y seleccionados sudamericanos.
De ocho a 10 por ciento del dinero cobrado era transferido al piloto Miguel Quiroga (muerto en el accidente en Colombia) y el resto de la tripulación.