Los registros fueron efectuados por agentes de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada, en coordinación con la Secretaría de Marina, la Policía Federal, junto con “peritos de la institución especialistas en materias de química, criminalística, valuación y fotografía de la Agencia de Investigación Criminal (AIC)”.
Concretamente fueron cateados “varios domicilios” ubicados en Almoloya de Juárez, municipio del Estado de México donde está la prisión de la que se fugó Guzmán el 11 de julio pasado, Puebla capital, y las ciudades sinaloenses de Culiacán y Navolato.
El 16 y 17 de julio en un inmueble de Almoloya de Juárez se requisaron 168 “indicios diversos, un arma de fuego, tres cargadores y 59 cartuchos”.
El 28 de agosto en el estado de México y Puebla se incautaron “dos inmuebles, un arma corta, una camioneta, dos motocicletas, una cuatrimoto y diversa documentación”.
El 11 y 12 de septiembre en Culiacán y Navolato fueron registrados “un inmueble” y “una pista de aterrizaje” y se decomisaron “un teléfono celular, un equipo de circuito cerrado, una camioneta, diez avionetas, dos fuselajes, dos motores de aeronaves y diversa documentación”.
El 20 de octubre “en la colonia Las Quintas de Culiacán se aseguraron 165 paquetes de Narcóticos (cocaína, fentanil, heroína, metanfetamina y marihuana), un arma de fuego y una granada”.
Al día siguiente “en la colonia Plutarco Elías Calles (de esa misma localidad) fueron asegurados 288 paquetes de narcóticos (cocaína, fentanil, heroína y metanfetamina) así como una avioneta y un arma de fuego”.
Y el día 22 “en tres domicilios de la colonia Miguel Hidalgo y uno en el Fraccionamiento Camino Real de Culiacán, se aseguraron dos inmuebles y tres vehículos, finalmente el 23 de octubre, se aseguró un inmueble en el Fraccionamiento Estanza Toscana en Culiacán”.
El lunes, la Fiscalía informó que el juez que lleva el caso dictó auto de formal prisión, que marca el inicio de un proceso penal, contra nueve personas por su presunta participación en la fuga del narcotraficante.
Entre ellas la persona que coordinó las negociaciones para la compra del predio desde donde se construyó el túnel de 1.5 kilómetros hacia la prisión de la que se evadió el Chapo, y la persona que transfirió la propiedad del mencionado predio.
También está el coordinador de la construcción del túnel, la fuga y el traslado del criminal a una zona de Sinaloa, donde miembros de la Marina estuvieron a punto de capturarlo a principios de octubre.
Otra de las personas sometidas a proceso es el piloto que lo llevó en el vuelo “hasta su primer escondite”.