En el tribunal se anunció que el cofundador del cártel de Sinaloa es elegible a la pena de muerte en Estados Unidos al haber sido detenido en suelo estadounidense, aunque serán las máximas autoridades judiciales las que deben decidir si lo autorizan.
Zambada fue visto muy debilitado y presentando cojera, gran palidez en su rostro y cabello con parches por un degradado tinte oscuro. El juez Brian Cogan fijó para el 15 de enero del 2025 la próxima audiencia.
El fiscal general, Merrick Garland, tendrá que decidir si autoriza a que uno de los narcotraficantes más longevos y buscados por Estados Unidos antes de ser detenido en suelo estadounidense el 25 de julio, pueda ser elegible a la pena capital.
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En 2021, Garland declaró una moratoria a las ejecuciones federales, en contraste con su predecesor bajo el gobierno de Donald Trump que llevó a cabo una docena en seis meses.
A principio del 2024 aplicó la medida contra el joven supremacista que el 14 de mayo de 2022 mató a 10 personas en un supermercado en Búfalo, Nueva York.
Por otra parte, el juez Cogan sentenció el 16 de octubre en la misma sala al exsecretario de Seguridad Pública mexicano Genaro García Luna a más de 38 años de cárcel y hace cinco años a Joaquín “Chapo” Guzmán a cadena perpetua. Cogan confirmó que en el caso de Zambada se podría aplicar la pena de muerte.
La acusación en Nueva York contra el Mayo, huido de la justicia durante más de cuatro décadas, y cuya captura se elevó en Estados Unidos en US$ 15 millones, fue actualizada en febrero y es la única que menciona el tráfico de fentanilo, el opioide 50 veces más potente que la cocaína que causa decenas de miles de muertes al año en Estados Unidos por sobredosis.
Su compadre cofundador en los años 1980 del cártel de Sinaloa, Joaquín “Chapo” Guzmán, fue condenado en Estados Unidos a cadena perpetua, ya que en su caso fue extraditado y entre en los acuerdos estaba excluida la eventual condena a pena capital.
Zambada se declaró el 14 de septiembre no culpable de los 17 cargos de los que le acusa la justicia estadounidense, como empresa criminal continuada, asesinato y tráfico de armas y drogas.
El narco mexicano fue detenido el 25 de julio en Nuevo México al aterrizar en un pequeño avión en compañía de Joaquín Guzmán López, hijo de el “Chapo”.
Zambada dijo haber sido víctima de una emboscada y engañado por Guzmán López, conocido también como “Chapito”, para ser traído a la fuerza a Estados Unidos a cambio de supuestas ventajas para éste y sus hermanos, cuyos casos se instruyen en un tribunal de Chicago, Illinois.
