“No fui allí para robarme un bebé”, le dijo Amoore a la policía después de que fue arrestada, de acuerdo con documentos interpuestos el viernes ante la corte. “Sentí como si estuviera cargando a mi hijo de nuevo. Se sintió tan bien”.
Amoore fue acusada de secuestro, ocultar a un niño y otros cargos. Permanece detenida con una fianza de US$500 mil a la espera de una audiencia preliminar el 15 de abril.
De acuerdo con la policía, entabló una conversación con la madre del bebé el jueves en el centro comercial King of Prussia, diciéndole que tenía un pequeño de la misma edad.
Siguió a la mujer y a su familia a varias tiendas y los acompañó a comer en la zona de restaurantes. Cuando el chico comenzó a lloriquear, preguntó si podía cargarlo mientras la madre respondía una llamada telefónica y atendía a otro niño. Entonces Amoore se alejó caminando con el bebé en brazos.
La madre, Malika Turner, intentó perseguirla pero tenía que mantenerse al tanto de su otro hijo pequeño, se afirma en la declaración jurada. En lugar de ello le pidió a la gente que llamara al teléfono de emergencias 911.
Tomas de las cámaras de seguridad del centro comercial, junto con muchas pistas que la gente dio, así como ayuda de parte de la familia de la sospechosa, le permitieron a la policía dar con el bebé ileso en el apartamento de Amoore en el municipio Tredyffrin.
“Tomé al bebé y les ofrezco una disculpa”, les dijo a los agentes cuando llegaron, de acuerdo con la declaración jurada.
El infante, Ahsir Simmons, fue hallado poco después de las 10 p.m., más de cuatro horas después de que desapareció.
Los mensajes que se le dejaron a la familia de Amoore no fueron devueltos el viernes.
Le dijo a la policía que dio a luz el 11 de febrero, pero señaló que el parto no fue en un hospital, de acuerdo con el sargento Jay Johnson de Upper Merion. Los detectives intentan determinar la veracidad de esa afirmación.