Los alrededores del Memorial del 11 – S, en el centro del distrito financiero de Nueva York, se llenaron de personas que portaban ramos de flores y que llevaban en su vestimenta broches con la fotografía de sus seres queridos fallecidos, también acompañados de un pequeño lazo azul en solidaridad con las víctimas.
A pesar que han pasado más de dos décadas desde el atentado más grave en la historia de Estados Unidos, todos los asistentes recordaron con claridad ese día. Muchos aseguraron con pesar que nunca se sentirán compensados porque no hay nada que pueda remediar la ausencia de sus familiares.
“Pase lo que pase, (las víctimas) todavía nos sentimos engañadas, y nada va a cambiar eso. Está bien que las personas que estuvieron detrás de los atentados estén en la cárcel, pero estamos hablando de una gran tragedia y una gran pérdida, y eso nunca podrá repararse”, expresó a EFE Lisa Méndez, quien vestía una camiseta con el rostro de su primo, Edward Calderón, víctima en el atentado.
De igual modo, Rosa Paris, quien perdió a su único hijo, contó a la prensa que nada puede compensar el sufrimiento de todos estos años y la ausencia de su familiar.
Ram Saren, cuya hija murió, dijo con la voz entrecortada que el paso de los años no hace que todo se vuelva más fácil. “Ese día lo tengo grabado en mi corazón”, aseguró entre lágrimas.
No obstante, entre los presentes también había quienes afirmaban sentirse en paz y haber perdonado a los atacantes, como es el caso de Karol Trinidad, que a pesar de haber perdido a su hermano Michael aseguró sentirse “en paz con todos”.
“No culpo a nadie, cada uno tiene su propia mentalidad. Solo sé que (las víctimas) están en un mejor lugar que en el que estamos nosotros”, externó con una sonrisa apagada.
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Aniversario en mitad de la campaña electoral
Este 2024, el aniversario del 11-S tuvo lugar solo dos meses antes de las elecciones presidenciales y apenas horas después de que los dos candidatos a la Casa Blanca, Donald Trump y Kamala Harris, protagonizasen un agitado debate televisado. Ambos candidatos estuvieron presentes en la conmemoración oficial.
Harris y Trump se dieron un apretón de manos durante la ceremonia, bajo la mirada del presidente estadounidense saliente Joe Biden.
Elvin García, un bombero de origen ecuatoriano que tras el atentado trabajó en las operaciones para tratar de rescatar víctimas de entre las ruinas, recordó muy bien cómo, en un principio, estaba convencido de que de los escombros rescataría a personas vivas, aunque finalmente asumió que lo que encontraría allí serían solo cadáveres.
Tras haber visto en primera persona lo sucedido, García pidió al próximo presidente de Estados Unidos que atienda a los familiares, ya sea con ayuda psicológica o económica, pues muchos de las víctimas eran los únicos proveedores de ingresos para sus familias.
Por su parte, Trinidad pidió a los candidatos que pongan “los pies en el suelo”. “Necesitamos paz en este planeta. Necesitamos parar todas estas guerras que se llevan a cabo de manera mezquina”, aseveró.
En el homenaje, como cada año desde el atentado, las familias pronunciaron los nombres de todas las personas que perdieron la vida y colocaron flores y banderas estadounidenses en los nombres grabados sobre los dos grandes fosos que hoy sustituyen a las Torres Gemelas en el lugar donde se levantaban.
Por su parte, el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) guardó un minuto de silencio en recuerdo a las víctimas del atentado de 2001 en Estados Unidos, pero también por el golpe de Estado en Chile en 1973; y por las víctimas del accidente de helicóptero en El Salvador, entre ellas el jefe de la Policía, Mauricio Arriaza.
