El ministro portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, lee declaración institucional sobre Cataluña. (Foto Prensa Libre: EFE)
El Gobierno español aplicará la Constitución para asumir funciones que ejercen las autoridades de Cataluña y restablecer así la legalidad, después de que el presidente regional, Carles Puigdemont, avisara este jueves de que el Parlamento catalán podría votar la independencia si no hay diálogo.
Un Consejo de Ministros extraordinario presidido por Mariano Rajoy aprobará el sábado medidas para “proteger el interés general de los españoles, entre ellos los ciudadanos de Cataluña” y restaurar la legalidad en la región, según las previsiones del artículo 155 de la Constitución, informó hoy el Ejecutivo.
Ese artículo establece que, si una autoridad autonómica no atiende el requerimiento para volver a la legalidad, el Gobierno aprobará un decreto con medidas concretas para asumir competencias regionales, que enviará al Senado para su autorización y aplicación efectiva.
Puigdemont comunicó por carta a Rajoy que, si este “persiste en impedir el diálogo”, el Parlamento regional “podrá proceder a votar la declaración formal de independencia” de Cataluña.