Estos solicitantes de asilo explicaron que habían recibido insultos, ataques y les habían grabado o pintado signos de extrema derecha en las puertas.
“Estoy profundamente preocupado por este tema y he encargado a funcionarios del ministerio una investigación urgente”, dijo el secretario de Estado de Inmigración, James Brokenshire.
“Si encontramos alguna prueba de discriminación contra los solicitantes de asilo, nos ocuparemos inmediatamente de ella, porque tal comportamiento no será tolerado”, añadió.
The Times identificó 168 propiedades administradas por Jomast, 155 de las cuales tenían las distintivas puertas rojas.
El periódico contactó a los residentes de 66 propiedades, 62 de los cuales eran solicitantes de asilo. “Cuando la gente las ve (las puertas de color rojo), todo el mundo sabe que significan solicitantes de asilo”, dijo un hombre cuya casa fue objeto de vandalismo.
G4S negó “categóricamente” que hubiera alguna intención tras las puertas rojas y ordenó a Jomast volver a pintarlas.
Sin embargo, la vecina Suzanne Fletcher dijo que la cuestión se había planteado hace ya cuatro años. “En septiembre del 2012 preguntamos a G4S si iban a hacer algo con las puertas rojas y respondieron que no tenían ninguna intención de hacer nada” , dijo a la radio BBC.
Actos racistas
Los actos racistas, antisemitas y antimusulmanes aumentaron 22% en el 2015 en Francia con respecto al 2014, con un repunte después de los atentados de enero y noviembre, en particular contra los musulmanes.
En total se registraron el año pasado en el país dos mil 32 actos y amenazas racistas, antisemitas y antimusulmanes, según las cifras anunciadas por el organismo gubernamental DILCRA (Delegación interministerial de lucha contra el racismo y el antisemitismo).
“Es la primera vez que se sobrepasa el tope de dos mil” actos registrados, recalcó Gilles Clavreul, responsable del organismo, agregando que se trata de un “reto para toda la sociedad francesa”.
El informe de la DILCRA confirma las grandes líneas anunciadas el martes por el ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, con el mantenimiento de “un alto nivel” de la violencia antisemita (800 actos y amenazas) y un fuerte aumento (+223%) de la antimusulmana, que totalizó 429 actos y amenazas.
Esa triplicación, calificada de “hecho más espectacular” por Clavreul, es atribuible en gran medida a “violencias en reacción a los atentados de enero y noviembre” en París, ya que los actos y amenazas cometidos durante esos dos meses representan el 58% del total en el 2015.
Al mismo tiempo, los actos antisemitas retrocedieron un 5.3%, pero esa cifra “sigue siendo muy alta” después de un repunte en el 2014.
Pero hay que señalar que el informe da cuenta de una “disminución sensible” (-53%) de los actos antisemitas en el segundo semestre del año con respecto al mismo período del 2014.
“Hay que ver si esa disminución se confirma este año”, dijo Clavreul, agregando que “espera” que sea una “toma de consciencia de que esos actos son inaceptables”.
“Se necesitaría la misma determinación contra los actos antimusulmanes”, recalcó, insistiendo en que todos esos actos deben “ser tratados con la misma severidad”.
Los actos racistas sin carácter religioso aumentaron, por su parte, 18% para llegar a 797. El informe no contiene más detalles al respecto, dado que en Francia están prohibidas las estadísticas étnicas.
La propia DILCRA señala empero que esas cifras son “imperfectas”, ya que numerosas víctimas no presentan denuncia.
Una reciente encuesta del Instituto Nacional francés de Estudios Demográficos (Ined) daba cuenta del nivel de discriminación que sufren en Francia los inmigrantes e hijos de inmigrantes, un fenómeno que sin duda reflejan sólo parcialmente las cifras de violencia racista publicadas el miércoles.
