El Ministerio de Medio Ambiente indicó en X que de las 508 réplicas, 129 han sido sentidas por la población, siendo las más fuerte, un temblor de 5 grados, registrado la mañana del lunes.
De acuerdo con Protección Civil, “el origen de esta actividad sísmica es atribuido a la activación de fallas geológicas en la zona, la cual tiene el potencial de generar un sismo con magnitud similar o superior al evento de magnitud 5.8 grados”.
Según detalló esta entidad en sus boletines, “existe una alta probabilidad de que la zona continúe experimentando réplicas con magnitudes entre 2.5 y 5.0 en la escala de Richter durante la próxima semana”.
Hasta el momento, Protección Civil únicamente se han reportado deslizamientos y caída de rocas en sectores de carretera, así como el colapso de una vivienda en el distrito de La Unión, “como consecuencia del evento principal y sus réplicas”.
La mayoría de los sismos que se producen en El Salvador habitualmente tienen su origen en aguas del océano Pacifico y a mucha profundidad.
La última vez que El Salvador sufrió graves daños y pérdidas humanas por un terremoto fue en 2001, cuando se produjeron dos sismos de 7,7 y 6,6 con un mes de diferencia, dejando alrededor de 1 mil 200 muertos y más de 8 mil heridos.