El tren de aterrizaje del vuelo 7C2216: pieza clave en un trágico accidente aéreo
Previo a la tragedia, pasajeros del vuelo de Jeju Air, procedente de Bangkok, Tailandia, enviaron mensajes a sus familias bromeando sobre un choque con un ave, mientras la tripulación alertaba de un fallo técnico.
Los bomberos trabajan en los restos del avión Jeju Air en el Aeropuerto Internacional de Muan. (Foto Prensa Libre: EFE)
El siniestro aéreo ocurrido el 29 de diciembre, aún rodeado de incógnitas, dejó 179 muertos y solo dos supervivientes, causando una tragedia que ha golpeado duramente a numerosas familias.
El impacto aparente con un pájaro y el fallo del tren de aterrizaje parecen ser factores clave para entender el accidente del vuelo 7C2216 de la aerolínea surcoreana Jeju Air.
Familiares de las víctimas han relatado que recibieron mensajes instantáneos antes del accidente. Algunos pasajeros bromeaban acerca del choque con un ave, tras ser informados por la tripulación de un problema en el avión.
Posibles causas del accidente
Seis minutos antes de aterrizar, el vuelo 7C2216, un Boeing 737-800, recibió una alerta de riesgo aviario desde la torre de control del aeropuerto de Muan, ubicado a 290 kilómetros al suroeste de Seúl. Este tipo de advertencias se emiten cuando se detecta una gran bandada de aves en la trayectoria del avión.
Dos minutos después, el capitán emitió un "mayday" antes de aterrizar sin desplegar el tren de aterrizaje ni utilizar otros sistemas de frenado, como los spoilers (placas en las alas que aumentan la resistencia al aire) o el empuje inverso de los motores.
Expertos sugieren que el incendio en el motor derecho, captado en imágenes antes del aterrizaje, pudo haber sido provocado por el impacto de un ave. Sin embargo, también se investigan posibles fallos en el mantenimiento de la aeronave o defectos mecánicos adicionales.
La investigación, que podría extenderse durante años, enfrenta complicaciones debido al daño parcial en una de las cajas negras, la grabadora de datos de vuelo (FDR). La decodificación de esta información será crucial para esclarecer lo ocurrido.
Detalles del avión y la tripulación
El Boeing 737-800, con 15 años de antigüedad, era propiedad de la aerolínea irlandesa Ryanair y estaba alquilado a Jeju Air desde 2017. Según el diario The New York Times, este modelo es conocido por su fiabilidad.
El capitán del vuelo, de 45 años, acumulaba 6.823 horas de experiencia, de las cuales 6.096 correspondían al 737-800. Por su parte, el copiloto, de 35 años, tenía 1.650 horas de vuelo, incluyendo 1.339 en el mismo modelo de aeronave.
Aunque la pista de aterrizaje de Muan estaba parcialmente cerrada por obras, dejando 2.500 metros disponibles, las autoridades surcoreanas aseguran que el 737-800 puede aterrizar sin problemas en pistas de solo 1.500 metros.
Las víctimas y el impacto en la comunidad de Muan
El vuelo, contratado mayoritariamente a través de agencias de viajes, transportaba principalmente a familias completas que buscaban escapar del frío invernal surcoreano.
Entre las víctimas se encontraba un grupo de nueve personas de cuatro generaciones que celebraban el cumpleaños del pasajero más anciano del avión, un hombre de 78 años.
La mayoría de los pasajeros tenía entre 40 y 60 años, aunque también se reportaron cinco menores de 10 años y otros nueve menores de 20.
El accidente ha devastado a la comunidad local, ya que el Aeropuerto Internacional de Muan, Corea del Sur, es utilizado principalmente por los residentes de esta región rural.
Un accidente que exige respuestas, los dos supervivientes serán testigos clave
De las 181 personas a bordo, solo dos sobrevivieron: ambos auxiliares de vuelo que estaban en la cola del avión, la parte menos afectada por el impacto.
Uno de ellos, un hombre de 33 años apellidado Lee, se encuentra hospitalizado en la unidad de cuidados intensivos con varias fracturas y pronóstico reservado. La otra sobreviviente, una mujer de 25 años apellidada Koo, sufrió heridas en la cabeza y un tobillo, pero se encuentra estable. Según su relato, "empezó a salir humo de uno de los motores y luego explotó".
El trágico vuelo 7C2216 deja tras de sí una estela de dolor y preguntas. Mientras las investigaciones avanzan, las autoridades y expertos trabajan para comprender las causas exactas de este siniestro, buscando prevenir tragedias similares en el futuro.