El líder de la expedición, Rob McCallun, admitió que el sumergible Tritón colisionó con el naufragio del Titanic debido a “corrientes intensas y altamente impredecibles” causaron que el piloto perdiera el control.
“Intentamos mantenernos alejados del Titanic, pero tuvimos que acercarnos para depositar dos muestras científicas”, agregó.
Esta es la primera colisión con el Titanic hecha pública desde que se descubrió el naufragio en 1985.
Lo restos del Titanic yacen en el Atlántico Norte a 13 mil pies de profundidad (más de cuatro kilómetros al fondo del mar) y a 600 kilómetros de la costa de Terranova.
Actualmente, Gran Bretaña y Estados Unidos firmaron un tratado internacional que impide toda visita no internacional al naufragio del Titanic, una forma para proteger los tesoros al interior de este buque.
Uno de los objetivos de este tratado es frenar las intenciones de la empresa RMS Titanic Inc, eventual administradora del barco desde 1993 y que ha hecho pública sus intenciones para abrir el techo de una de las cubiertas y extraer lo que haya en su interior (objetos antiguos, pinturas, instrumentos), supuestamente para “evitar” su destrucción.