Durante el mensaje antes del rezo del ángelus celebrado en la biblioteca y no asomado a la plaza de San Pedro, ya que Italia se encuentra confinada por la emergencia sanitaria, Francisco explicó que este año dedicado a la familia se produce en ocasión del quinto aniversario de la exhortación apostólica “Amoris laetitia”, la publicación tras el sínodo dedicado a este tema.
“Este año especial será una oportunidad para profundizar en los contenidos del documento Amoris laetitia, a través de propuestas e instrumentos pastorales, que se pondrán a disposición de las comunidades y familias eclesiales, para acompañarlos en su camino”, agregó Francisco.
El papa invitó a todos los católicos “a sumarse a las iniciativas que se impulsarán durante el año y que serán coordinadas por el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida”.
“Que la Virgen María, a la que ahora nos dirigimos con la oración del Ángelus, obtenga a las familias de todo el mundo sentirse cada vez más fascinadas por el ideal evangélico de la Sagrada Familia, de modo que se conviertan en levadura de nueva humanidad y de una solidaridad concreta y universal”, concluyó.