Luego de su captura en 2016 y posterior extradición hacia Estados Unidos, el reconocido narcotraficante mexicano fue juzgado por los delitos de tráfico de droga y lavado de dinero por las autoridades estadounidenses en un juzgado de Nueva York.
Como parte de este juicio, los fiscales neoyorquinos revelaron una llamada telefónica donde “El Chapo” se encuentra negociando un cargamento de cocaína procedente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
La llamada tuvo lugar en mayo de 2010 y de acuerdo con el narcotraficante Jorge Milton Cifuentes Villa, quien declaró en contra de Joaquín Guzmán en su juicio, fue para coordinar la entrega de un cargamento de cocaína entre el Cártel de Sinaloa y las FARC.
Este audio muestra a “El Chapo” negociando con un proveedor no identificado de las FARC y ambos discuten la posibilidad de realizar un envío de seis toneladas de cocaína desde Colombia hacia una bodega ubicada en Guayaquil, Ecuador, donde la droga posteriormente sería trasladada a México.
Las grabaciones demuestran que la llamada fue iniciada por Tomás Guzmán, sobrino del narcotraficante mexicano, quien se encontraba en Colombia para negociar la operación entre ambos grupos criminales.
“Aquí hay seriedad. Y me da gusto que sin conocerlo a usted nos dé esta seriedad”, indicó Joaquín Guzmán en la llamada.
A pesar de que la negociación iba en curso, “El Chapo” tomó unos minutos para quejarse sobre el último envío de cocaína proveniente de las personas asociadas a las FARC, ya que según el capo del narcotráfico este producto no era de óptima calidad.
De igual forma, propuso enviar a un técnico para que certificara la calidad de la cocaína antes que esta fuera enviada a Guayaquil.
“Necesito que me haga un favor y que un muchacho cheque las cosas, porque hay cosas que han llegado bajas. Se trata de que las cosas estén buenas”, añadió el narcotraficante.
Ante la solicitud del entonces líder del Cártel de Sinaloa, el negociante de este grupo criminal colombiano aceptó que una persona viajara para revisar el producto que posteriormente sería trasladado hasta México.
Añadido a esto, el hombre de las FARC aseguró que si la cocaína enviada a “El Chapo” no era de la calidad esperada, el narcotraficante mexicano no tendría que pagarla.
Para finalizar, el negociante y “El Chapo” hablaron sobre el precio del producto, el cual el hombre asociado al grupo criminal de Colombia estableció que sería US$2 mil 100 por kilo, incluyendo el “flete” desde territorio colombiano hasta Ecuador.