Con su hijo Barron a su derecha, y su marido, Donald, a la izquierda, Melania Trump inauguró el lunes las festividades de Pascuas desde el balcón semicircular que da a los jardines de la Casa Blanca.
Cuando sonaba el himno nacional, Barron y Melania pusieron instintivamente sus respectivas manos derechas sobre el corazón, pero el presidente no reaccionó inmediatamente.
Con un ligero movimiento de la mano, la primera dama, exmodelo de origen esloveno, le recordó al 45 presidente de Estados Unidos que no mantuviera las brazos a lo largo del cuerpo cuando sonaba el Star-Spangled Banner.