El cuerpo de Turcios fue localizado en una carretera en la localidad de Santa Rosa Guachipilin, del occidental departamento de Santa Ana, y las autoridades dijeron que presentaba “signos de estrangulamiento” con “dos bolsas plásticas alrededor de la cabeza” y entre 6 y 8 horas de fallecida.
El director general de la PNC, Howard Cotto, dijo en la presentación del inculpado que Huezo fue capturado en una céntrica zona de la capital salvadoreña, tras recibir la orden de detención de la Fiscalía General de la República (FGR), “que reunió pruebas suficientes para señalar que fue él quien cometió el feminicidio”.
“Los elementos probatorios tienen que ver con los registros de las cámaras de vídeo vigilancia que demuestran que Huezo mintió en la versión que dio sobre la desaparición de su esposa el mismo sábado en que se produjeron los hechos”, precisó Cotto.
La Prensa Gráfica, diario del mismo grupo editorial de El Economista, denunció en la mañana el 17 de abril la desaparición de Turcios en una publicación en la que se detalló que el esposo de la comunicadora salió de casa con su hijo y que al regresar “ya no la encontraron”, por lo que “le escribió y le llamó, pero no obtuvo respuesta”.
El cónyuge de Turcios comentó al medio que en la vivienda encontraron una nota que decía “adiós a su hija lic p-rro”, aparentemente dirigida al padre de Karla, quien recientemente “tuvo problemas con un hombre que ofrecía plazas en la Corte Suprema de Justicia (CSJ)”.
Declaraciones del Fiscal General, Douglas Meléndez, en la inspección de la vivienda de la víctima pic.twitter.com/Jn3vb7I2nb
— Fiscalía General de la República El Salvador (@FGR_SV) April 24, 2018
“Él le entregó los currículum de Turcios y Huezo, y días después se dieron cuenta que el hombre era un estafador, por lo que lo amenazó”, relató el matutino. Según Cotto, las pruebas arrojadas durante la investigación de la muerte de la periodista “dejan claro que el esposo mintió en sus declaraciones respecto a la desaparición y muerte de Turcios”.
“La ruta señalada por las cámaras de seguridad establece con claridad que él tomó rumbo a la carretera que lleva al lugar donde apareció la periodista y no al lugar que él declaró ante la Policía en el momento de poner la denuncia de desaparición”, precisó el funcionario.
Además, el análisis de las bitácoras telefónicas desmienten las declaraciones iniciales de Mario Huezo, “quien incurrió en diversas contradicciones en las sucesivas declaraciones que hizo a las autoridades y a la prensa”.
“De acuerdo a los elementos que tenemos hay una fuerte posibilidad que el homicidio se haya cometido en la vivienda, por lo que la PNC y la FGR están llegando, en estos momentos, a la casa donde ellos residían y donde vive el padre de Karla, para obtener más pruebas”, agregó el director policial.
Cotto señaló que, además, hay pruebas para saber que Huezo mintió y “además cometió en error de entregar una nota con una supuesta amenaza hacia Turcios, que era falsa”.
Cuando Huezo acudió a identificar a la asesinada, “nuevamente incurrió en contradicciones, y este, igual que muchos otros elementos evidencian la culpabilidad del esposo de la comunicadora”.
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