Depredador de océanos
El plástico, en forma de botellas, bolsas o tapones, es el principal “depredador” de los océanos, denunció la oenegé Surfrider luego de un estudio de la contaminación en cinco puntos de las costas francesas y españolas.
Con la ayuda de centenares de voluntarios, la oenegé llevó a cabo en el 2015 en varias zonas de Bretaña y del País Vasco un estudio de los residuos que contaminan las playas, las costas y los fondos marinos, en el marco de un proyecto de alcance europeo.
“Cada día ocho millones de toneladas de residuos acaban en el océano. El 80% de la contaminación de nuestros mares es de origen terrestre y consecuencia de la actividad humana, con repercusiones terribles en la biodiversidad y en el conjunto de nuestro medio ambiente”, afirma el presidente de Surfrider Foundation Europe, Gilles Asenjo, en un comunicado.
Según la oenegé, el plástico constituye “más del 80%” de los residuos en los cinco lugares del estudio. Es el caso de la playa de Burumendi, en Mutriku, España, donde el 96.6% de los cinco mil 866 residuos recogidos son de plástico o de poliestireno.
En la playa de La Barre, en Anglet, Francia, la proporción es de 94.5 por ciento sobre un total de 10 mil 884 residuos.
El plástico y el poliestireno también están presentes en abundancia en la playa de Porsmilin de la localidad francesa de Locmaria-Plouzané (83.3 por ciento, dos mil 945 residuos).
La proporción es mucho menor en la playa de Murguita de San Sebastián, España, donde hay un 61 por ciento de plástico y de poliestireno pero también un 18 por ciento de vidrio.
Y en la playa de Inpernupe, en Zumaia, España, cerca de la mitad de residuos son vidrio (47.9 por ciento) y el 29.1 por ciento son plástico y poliestireno.
Además del plástico, los voluntarios también encontraron en los cinco lugares del estudio cordajes y redes de pesca, colillas, envases de comida, tapones, botellas de vidrio y de plástico, bolsas o pañales.
En cada lugar, Surfrider estableció una lista de los 10 principales residuos.
“Se trata de las primeras indicaciones, que nos das una idea de las cifras europeas”, según Asenjo.
“Desde la Bretaña hasta el País Vasco, está claro que los residuos plásticos humanos son el primer depredador del océano”, afirma el responsable de la oenegé, y recuerda que, a diferencia de la madera o el cartón, el plástico tarda centenares de años en desaparecer.
“Si [los plásticos] no están debajo de nuestros pies, se los comen los animales marinos y luego se ahogan. Y ya no hablo de las sustancias tóxicas que generan y en las que nos bañamos o de su posible integración en la cadena alimentaria”, añade.
Video: Continente basura
En Guatemala
Al menos 250 mil toneladas de plástico flotan en la superficie del mar en todo el mundo, y las costas guatemaltecas no escapan a ese problema, señalan ambientalistas.
Recientemente, un equipo de expertos se adentró en aguas de las costas del Pacífico, en Puerto San José, Escuintla, en busca de evidencias sobre la presencia de micropartículas de plástico –menores a los cinco milímetros-, y sus sospechas fueron confirmadas, pues luego de un análisis se determinó la presencia de estas en peces que fueron capturados durante la expedición.
De acuerdo con expertos, el problema es más complejo de lo que se cree, pues grandes cantidades de plástico llegan cada año al mar, convirtiéndose en alimento para peces, lo que causa preocupación, pues grandes cantidades de estos terminan en pescaderías del país.
Sergio Izquierdo, director de la organización Rescue The Planet, señaló que ese tipo de contaminación es un problema de alcance mundial, por lo que sugiere a la población disminuir el uso de plásticos desechables.
Añadió que las costas del Pacífico de Guatemala están siendo afectadas por grandes cantidades de micropástico, como ocurren en la India y EE. UU., por lo que recientemente comenzaron la investigación –primera en Centroamérica-.
Marcus Eriksen, director de la organización 5 Gyres, quien ha efectuado estudios en mares de diferentes partes del mundo, dijo que se interesaron en Guatemala en busca de generar propuestas que permitan preservar los recursos naturales.
Explicó que como parte de la investigación se tomaron tres muestras de agua —a 10 y 30 millas náuticas de la costa—, que fueron analizadas en un laboratorio de la Universidad del Valle de Guatemala (UVG).
Añadió que es necesario hacer más investigación para entender la problemática y determinar de dónde vienen los plásticos que llegan al mar. “La contaminación es grande. Encontramos cantidades de microplástico mayores a las que esperábamos”, refirió.
Las costas de Guatemala no escapan al plástico, una de las principales amenazas para los océanos. ►https://t.co/GbRch0lAz3 pic.twitter.com/mKwjrRpllQ
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Preocupación
Ninoshca López, estudiante de biología, refirió que es importante tomar en cuenta el daño que el plástico causa al mediobiente, porque el problema repercute en la salud de las personas. “Es necesario evitar el uso de plásticos, y desde el hogar se puede obtener grandes resultados”, afirmó.
Diego Flores, otro estudiante de biología, señaló el tema de contaminación por plástico debe de estar en la agenda nacional, pues en los alimentos que a diario consumen los guatemaltecos hay partículas de esos materiales.
#ReciclaXGuate Reciclando papel, plástico y vidrio, los Pérez Chan de Xela, colaboran con el ambiente. https://t.co/XXFCfrmF7p pic.twitter.com/YZXAXcPiUz
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José Miguel Leiva, analista ambiental independiente, señaló que la contaminación por plástico es un tema que debe interesar a diversos sectores, pues el consumo de ese tipo de producto se ha quintuplicado en los últimos años, tanto con fines industriales como comerciales.
Agregó que el problema se origina desde la fabricación, porque algunos productos como el vinil y polivinil contienen contaminantes y no son biodegradables.
Explicó que además del plástico, el duroport representa una amenaza para el ambiente y la población, porque cuando este se degrada es “altamente” tóxico, ya que produce gases de efecto invernadero. La descomposición del duroport dura entre cien y 150 años, señaló.
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Agregó que en Guatemala no hay cultura de manejo de desechos sólidos y que en la mayoría de municipios se utilizan los ríos, como Las Vacas y Suchiate, como basureros.