Elecciones en EE. UU.
Desde adentro: Así son los mítines de Kamala Harris y Donald Trump
Varios contrastes fueron observados en las concentraciones organizadas por republicanos y demócratas, a pocos días del día D.
Kamala Harris lanza críticas a su rival Donald Trump durante el rali del viernes 1 de noviembre en Milwaukee. (Foto Prensa Libre: Geovanni Contreras)
Hasta en los estilos musicales son distintos. Los mítines -ralis, en Estados Unidos- de Kamala Harris y Donald Trump contrastan en muchos aspectos además de los discursos y promesas de campaña.
Los dos eventos se llevaron a cabo la noche del 1 de noviembre en la ciudad de Milwaukee, Wisconsin, a la misma hora, algo que no había ocurrido antes en esa metrópoli y que demuestra el gran interés de ambos candidatos por ganar en dicho estado, considerado como “péndulo”.
En el caso de la vicemandataria y presidenciable demócrata, el rali estuvo dominado por un público multirracial y por invitados políticos y de la industria del entretenimiento.
Miles de personas hicieron fila para ingresar a un salón de eventos de grandes dimensiones y en cuyo centro se ubicó la tarima, el podio y los telepronters de Harris. El público fue organizado en sillas y graderíos alrededor de esa parte central, y los medios de comunicación al frente y del lado izquierdo de la tarima principal.
Este rali se realizó con discursos de políticos y comediantes, intercalados con números musicales especialmente de artistas de rap y hip-hop, como MC Lyte, conocida rapera desde la década de 1990.
Estas presentaciones mantuvieron al público asistente entretenido e incluso bailando.
El alcalde de Milwaukee, Cavalier Johnson, fue de los primeros en tomar la palabra para criticar a Trump y todo lo que el expresidente defiende.
De lo que más causó comentarios fue que posiblemente llegaría Cardi B, controversial artista de hip-hop. Poco a poco se hizo más fuerte el rumor de que estaría, por lo que la gente esperaba una presentación.
Finalmente, la intérprete llegó vestida de blanco, pero no para cantar, sino para dar un discurso en favor de Harris.
Destacó, a su estilo, la importancia de la libertad reproductiva y de las mujeres.
Finalmente fue presentada Harris, quien entró por una pasarela azul en un dintel amplio cubierto por una bandera gigante de Estados Unidos.
El rojo y las gorras
Por el lado de Donald Trump, el rali se llevó a cabo en un lugar mucho más grande que el de Harris, un campo techado de básquetbol con pantallas gigantes en el centro del techo.
Miles de estadounidenses llegaron con al menos una prenda roja. También había gorras de distintos colores y con distintos mensajes de apoyo a Trump. Pero tuvieron que ser más pacientes no solo para ingresar al recinto sino para esperar las palabras de su candidato.
Algunos políticos republicanos -congresistas y senadores- hablaron para criticar la gestión del presidente Joe Biden y de la candidata demócrata.
Sobre la administración que está por concluir señalaron la inflación y el “mal manejo” de las crisis internacionales, especialmente las guerras y tensiones entre Rusia y Ucrania, y en el Medio Oriente.
No obstante, entre el pequeño número de intervenciones y la llegada de Trump, el público pasó una hora y media con música a todo volumen, principalmente música de décadas pasadas y algo incluso de country.
Finalmente llegó el expresidente norteamericano, cuyo discurso duró tres veces más que el de Harris. Los dos políticos concentraron sus esfuerzos los últimos días en el estado de Wisconsin, considerado como péndulo, pues en las últimas dos elecciones han ganado una vez cada partido, con diferencia mínima de 20 mil votos.