El sospechoso, de 18 años, se atrincheró por más de dos horas dentro de la casa móvil donde se desató el tiroteo en la comunidad de Nash.
Después de una negociación con la policía, el sospechoso se entregó a las autoridades, explicó el Departamento del Alguacil de Bowie.
La policía encontró cuatro personas muertas dentro de la vivienda y creen que son miembros de una misma familia.
Las autoridades recibieron una llamada al servicio de emergencia del 911 sobre un hombre que estaba disparando a las personas dentro de una vivienda y que amenazaba con suicidarse, según reportó la televisora KETK.
La policía aún no ha identificado a las víctimas.
El sospechoso, que tampoco ha sido identificado, se encuentra detenido en la cárcel del condado, en espera de que avance la investigación y se le impongan cargos.
El tiroteo ocurrió a poco más de tres semanas de que un sospechoso mexicano disparara contra sus vecinos, matando a cinco personas de nacionalidad hondureña, incluido un niño de 8 años, en una vivienda en el condado de San Jacinto, a unos 90 kilómetros de Houston.