Los obispos habían puesto como condiciones el ingreso de la CIDH y el fin de la represión para convocar el diálogo propuesto por el gobierno, y del cual serán mediadores, para intentar solucionar la grave crisis que vive el país desde que iniciaron las protestas el 18 de abril y que dejan al menos 54 muertos, más de 400 heridos, unos 60 desaparecidos, decenas de negocios y casas saqueadas y quemadas y denuncias de detenciones ilegales.
Los estudiantes, que encabezan las protestas, dijeron que están dispuestos a dialogar, pero advirtieron que aún “no ha cesado la represión, el hostigamiento, la persecución y asesinatos en varios puntos de ese país”.
Sociedad civil y sector privado confirman asistencia
Representantes de la sociedad civil y del sector privado de Nicaragua expresaron su “anuencia” para “asistir al diálogo nacional” que se prevé comience mañana como vía para superar la crisis que ha dejado al menos 54 muertos en ese país, aunque coincidieron en que las circunstancias para esas discusiones no son las idóneas.
Así lo expresaron en un comunicado una veintena de representantes de organismos como la patronal nicaragüense COSEP, la Cámara de Comercio americana (Amcham), de colectivos de estudiantes universitarios, campesinos, y de la Fundación Nicaragüense para el desarrollo social y económico (Funides), entre otros.
“Tengan la seguridad que vamos a defender nuestros derechos y exhortamos a seguir en la lucha pacífica hasta que veamos cumplidas las demandas del pueblo nicaragüense”, indicaron las organizaciones, que exigieron el cese de los ataques y la represión por parte de los grupos paramilitares del Gobierno de Ortega.
Piden investigación total en Nicaragua
Organismos humanitarios celebraron la posible visita a Nicaragua de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para investigar las muertes registradas durante las protestas contra el presidente del país, Daniel Ortega, pero le pidieron que también indague sobre los crímenes anteriores.
“Recibimos con mucha alegría la notificación de la CIDH, sin embargo le hacemos un llamado, que en su visita tienen que esclarecerse todos aquellos delitos y acciones que han quedado en la impunidad vinculados a otros hechos sangrientos en nuestro país”, dijo a periodistas el secretario ejecutivo de la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH), Álvaro Leiva.
Leiva hizo referencia a diversas violaciones de los derechos humanos atribuidas al Gobierno de Ortega, como la muerte de civiles por parte de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas, la censura a medios de prensa o la represión hacia cualquier protesta, entre otras.
La ANPDH recordó que Ortega, hasta hoy, había negado el ingreso de la CIDH a Nicaragua hasta en 79 ocasiones en los últimos 11 años.
Dicha organización, junto con la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), resaltaron que las protestas contra Ortega que mantienen en crisis a Nicaragua han sido pacíficas, e insistieron en señalar al presidente como responsable de los actos violentos.
“Ambas comisiones queremos dejar claro que se tienen que aclarar, investigar, todos los hechos sangrientos dentro del marco de la protesta cívica, pacífica, como un derechos humanos que le asiste a los nicaragüenses”, indicó Leiva.
Según las comisiones, Ortega utiliza como brazos represores a la Policía Nacional, la Juventud Sandinista y fuerzas de choque conocidas como “turbas”.
Hoy se cumplen en Nicaragua 28 días de una crisis con multitudinarias manifestaciones a favor y en contra de Ortega, que iniciaron con protestas en contra de unas reformas a la seguridad social y que continuaron debido a las víctimas mortales de los actos represivos.
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