“Siempre le decía: sé calmo, paciente, dentro de dos años Israel no existirá más. La geopolítica cambia; Rusia, China,inclusive Estados Unidos ya no quieren más judíos de allí. Los llevarán a Ucrania. De qué sirve combatir? Ya lo hicimos y perdimos (…) pero él no quería escuchar. Estaba obsesionado” con la idea de combatir a Israel, comenta.
Llegado a Estados Unidos en 1973 desde Pakistán, el padre, también llamado Syed, de 67 años de edad, destacó que su hijo “siendo aún adolescente, no iba a las fiestas con sus compañeros porque, decía, un buen musulmán solamente puede ver bailar a su mujer” .
Dice haberlo visto una vez con una pistola y que montó en cólera contra su hijo. No obstante, asegura que “no sabe” si estaba en contacto con yihadistas.
Syed Farook era estadounidense, de 28 años, empleado de los servicios de salud de la ciudad californiana y ferviente musulmán. Durante la matanza estuvo acompañado de su mujer de 29 años, Tashfeen Malik, con quien se casó en Arabia Saudita. Ella también era de fe musulmana.
Éstos, tras matar a 14 personas y herir a otras 21 durante la fiesta que organizaba su empresa en San Bernardino por las fiestas navideñas, posteriormente fueron abatidos por la Policía. Eran padres de un bebé de apenas 6 meses.
Aviva el duro debate sobre armas y EI
La matanza perpetrada esta semana en Estados Unidos, calificada como “acto terrorista” , recrudeció la división política en el altamente sensible tema de las armas, mientras los republicanos acusan al gobierno demócrata de ser blando ante el yihadismo.
Para no dejar pasar esta lluvia de críticas, el presidente Barack Obama se dirigirá solemnemente a los estadounidenses la noche del domingo.
Su alocución al país ocurrirá unas pocas horas después de que en los tradicionales “talk show” de la mañana de domingo arremetieran contra él por no haber tomado las medidas que hubieran evitado el derramamiento de sangre cometido por Syed Farook y Tashfeen Malik.
Esta pareja de musulmanes presumiblemente radicalizados, con rifles de asalto, miles de municiones y artefactos explosivos, arrasaron a tiros un almuerzo de Navidad en el que se reunían compañeros de trabajo de Farook, dejando 35 víctimas, 14 muertos entre ellas. Luego fueron abatidos por la policía.
“Estamos gobernados por personas que no tienen idea de lo que está pasando. Cuando vemos al presidente Obama decir que el calentamiento global es nuestro primer problema, nos dice que no entiende absolutamente nada” , lanzó el domingo Donald Trump, que lidera los sondeos de los republicanos que aspiran a la Casa Blanca.
La masacre de San Bernardino, California, dio más argumentos al multimillonario en campaña, que sostiene que fueron musulmanes estadounidenses los que cometieron los ataques del 11 de septiembre.
Trump denunció la negativa de Barack Obama a utilizar el término “Islam radical” . “Mientras no admita que esto es un problema, nunca se solucionará” , subrayó.
“Los malos eran los únicos armados”
El precandidato republicano repitió su credo a favor de las armas personales, asegurando que habrían evitado la masacre.
“Miren los atentados en París. (Las víctimas no tenían) ningún arma. Nada. Y miren en California. Nada de armas. Personas malas eran los únicos armados” , lamentó.
Otros precandidatos republicanos suben el tono de sus declaraciones y usan vocabulario marcial para aparecer como más firmes, arremetiendo contra la estratega de Obama en Siria.
“La izquierda no lo quiere admitir, pero se trata de una lucha por la civilización occidental. Ellos nos han declarado la guerra” , dijo Jeb Bush, hermano e hijo de los expresidentes.
“La Casa Blanca crea todo tipo de obstáculos legales para los ataques aéreos. Hasta 75% de las salidas (de los aviones de combate) se realizan sin dejar caer bombas por temor a que se produzcan víctimas civiles. La administración (Obama) complicó aún más estos obstáculos” , denunció Jeb Bush.
Varios candidatos republicanos también se han burlado de que lo políticamente correcto llegue a hacer que la gente tenga miedo de alertar a la policía por temor a ser acusada de discriminación contra los musulmanes.
“Tenemos que dejar de demonizar a las personas que se esfuerzan por ser buenos ciudadanos” , afirmó el ultraconservador Ben Carson.
No es una guerra contra la religión
Acusada de respaldar las políticas de Obama, la candidata demócrata Hillary Clinton se vio obligado a defenderse.
Primero, dijo que Estados Unidos debía “reforzar significativamente sus ataques aéreos contra los objetivos del Estado Islámico” . Y luego, sostuvo que San Bernardino fue el escenario de un “ataque terrorista” .
Pero sobre la cuestión semántica del “Islam radical” , consideró que la expresión no tenía que usarse. “El problema es que da la impresión de que se declara la guerra a la religión” , explicó el ex secretaria de Estado.
Como su rival demócrata Bernie Sanders, Clinton reiteró su llamado a que se establezca un plan nacional de control de antecedentes penales y psiquiátricos antes que cualquier venta de armas.
Esta idea es firmemente rechazada por la todopoderosa Asociación Nacional del Rifle, la NRA.
El principal lobby estadounidense de las armas aprovechó también el tiroteo en California para justificar su lema: “Lo único que puede detener una mala persona con un arma de fuego es una buena persona con un arma” .
“Cuando el Mal toca nuestra puerta, los estadounidenses disponemos de un poder único en el planeta: el derecho rotundo a defender a nuestras familias según la Segunda Enmienda” , declaró en un video el presidente de la NRA, Wayne LaPierre, en alusión a este artículo constitucional que autoriza la posesión de armas individuales.
Autora de masacre estudió en Pakistán
Tashfeen Malik, que junto a su marido asesinó a 14 personas en California la semana recién pasada, estudió en una madrasa para mujeres de Pakistán, indicó este lunes una de sus profesoras.
Malik, de 29 años, estudió en el instituto Al-Huda de la ciudad de Multán, que acoge a mujeres de clase media que quieren acercarse al islam, indicó la profesora, que se identificó como Muqadas.
“Era un curso de dos años pero no lo terminó. Era una buena chica. No sé por qué se fue ni qué le pasó” , dijo la profesora.
Aunque el instituto, que tiene oficinas en Estados Unidos, India, Emiratos rabes Unidos y Reino Unido, no tiene relaciones conocidas con grupos extremistas, ha sido acusado de difundir una ideología cercana a la de los talibanes.
Un responsable de Al-Huda no quiso confirmar ni desmentir la información. “En todo caso no tenemos nada que ver con eso [el tiroteo] y no somos responsables de nuestros estudiantes” , aseguró.
Malik y su marido Syed Farook, de 28 años, provocaron una masacre en un centro social de San Bernardino (California) el pasado miércoles, un ataque reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico.
Según la policía, Malik, que tenía un visado para residir en Estados Unidos, pero pasó largos periodos en Pakistán y Arabia Saudí, podría haber radicalizado a su marido. Los investigadores están intentado determinar si tuvo contactos con islamistas radicales en algunos de esos países.
Malik estudió en la universidad Bahauddin Zakariya de Multán entre 2007 y 2013 y según sus antiguos compañeros fue en esa época cuando acudía al instituto Al-Huda al terminar las clases.
“Poco a poco se fue volviendo más seria y estricta” , dijo un estudiante que no quiso identificarse y aseguró que “cambió drásticamente” .
Las autoridades de Pakistán han prometido actuar contra las escuelas religiosas sospechosas de difundir el islam radical pero sus intentos han chocado con líderes religiosos que les acusan de atacar el islam.