Claudia Sheinbaum dialoga con Trump sobre migración y seguridad tras amenaza de aranceles
México es el principal socio comercial de Estados Unidos, adonde envía poco más de 80 % de sus exportaciones.
Claudia Sheinbaum, presidenta de México. (Foto Prensa Libre: EFE)
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, dialogó telefónicamente este miércoles con el mandatario electo estadounidense, Donald Trump, sobre migración y seguridad, dos temas que el republicano ha invocado para imponer aranceles a su vecino.
"Tuve una excelente conversación con el presidente Donald Trump. Abordamos la estrategia mexicana sobre el fenómeno de la migración y compartí que no están llegando caravanas (de migrantes) a la frontera norte porque son atendidas en México", dijo la mandataria izquierdista en su cuenta de X.
"También hablamos de reforzar la colaboración en temas de seguridad en el marco de nuestra soberanía y de la campaña que estamos realizando en el país para prevenir el consumo de fentanilo", añadió.
Sheinbaum había anticipado que buscaría una llamada con Trump, luego de que el republicano amenazara con imponer aranceles de 25% a México y Canadá -sus socios en el acuerdo comercial T-MEC- cuando asuma para un segundo mandato el próximo 20 de enero.
Según Trump, esa medida se mantendrá hasta detener lo que llamó la "invasión" de drogas y "migrantes ilegales" a Estados Unidos. Los nuevos gravámenes se extenderían a China.
La presidenta mexicana envió el martes una carta al magnate en la que advirtió que la migración y el consumo de drogas no se resuelven "con amenazas" y que, si Estados Unidos impone aranceles, México tomaría una medida similar.
México es el principal socio comercial de Estados Unidos, adonde envía poco más de 80% de sus exportaciones.
Este miércoles temprano, el gobierno de Sheinbaum redobló la apuesta al señalar que Estados Unidos se daría "un tiro en el pie" con un arancel generalizado.
"El impacto sobre las empresas es enorme. (...) Se perderían alrededor de 400.000 empleos" en Estados Unidos, aseguró en rueda de prensa el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, a partir de un cálculo basado en cifras de empresas automotrices de ese país que operan en México.
Los anuncios de Trump ya habían motivado una plática el martes entre el presidente electo y el primer ministro canadiense, Justin Trudeau.
"Tiro en el pie"
Ebrard dijo además que los aranceles impactarían directamente sobre consumidores estadounidenses.
Puso como ejemplo el mercado de camionetas pick up que se venden en Estados Unidos, un 88 % de las cuales proviene de México. Los derechos de aduana elevarían el precio de estos vehículos al consumidor en US$3 mil, aseguró.
"El impacto de esta medida, (el) principal, es en contra del consumidor en Estados Unidos (...). Por eso decimos que es un tiro en el pie", agregó el funcionario durante la habitual conferencia de prensa de Sheinbaum.
Ebrard sostuvo que México propondrá políticas para convertir a Norteamérica en el bloque comercial "más seguro, productivo y competitivo del mundo".
El planteamiento se funda en tres ejes, que incluyen "seguridad, migración y gobernanza", para fomentar la creación de empleos, la inversión y la optimización de las cadenas regionales de suministros, afirmó.
Más inflación
Reconociendo que hay "incertidumbre", el Banco de México (Banxico, central) dijo este miércoles que analiza opciones para hacer frente a la posible imposición de aranceles a México.
"No debemos adelantar conclusiones, pero eso no quiere decir que no estemos considerando distintos escenarios para que en su momento podamos considerar las implicaciones que podría tener", dijo la gobernadora del banco central, Victoria Rodríguez, durante la presentación de un informe trimestral de inflación.
Analistas del banco privado Citibanamex advirtieron en un reporte que la imposición de aranceles generaría inflación en Estados Unidos, "además de una depreciación del peso mexicano y una disminución de la actividad (económica) en México".
Entre los principales productos que México envía a Estados Unidos están automóviles y partes de vehículos, así como accesorios para maquinaria.
México, Estados Unidos y Canadá mantienen desde hace tres décadas un acuerdo comercial que fue renegociado durante el primer mandato de Trump (2017-2021), quien alegó que había perjudicado a las empresas estadounidenses, especialmente a las automotrices.