Agentes de 50 países
Los Juegos comienzan el 5 de agosto y Río espera la llegada de hasta 600 mil visitantes extranjeros, razón por la que Brasil está compartiendo datos de inteligencia, realizando ensayos de seguridad y estableciendo instalaciones conjuntas.
Además de un centro policial en el que oficiales de unos 50 países ayudarán a supervisar la seguridad en la cita olímpica, Brasil operará también un centro antiterrorista con expertos de naciones como Estados Unidos, Reino Unido, Francia y España.
“Tendremos allí a personas de todo el mundo para compartir mejor la información y aconsejarse unos a otros en sus áreas respectivas de conocimiento”, dijo Andrei Rodrigues, un inspector de la Policía que dirige un secretariado especial del Gobierno federal establecido para la seguridad durante la celebración de grandes eventos.
Han comenzado las amenazas
Por otro lado, el viernes la aerolínea Avianca lanzó un comunicado interno para prevenir la entrada en el país de un expreso de Guantánamo, sospechoso de tener vínculos con Al Qaeda.
Además, la Agencia Brasileña de Inteligencia (ABIN) también denunció haber descubierto un canal en portugés de comunicación entre terroristas usando la aplicación Telegram.
ABIN ya constató, a su vez, la existencia de una red de tráfico de personas, algunas de las cuales tendrían vínculos con terroristas en Medio Oriente. Incluso divulgó la existencia de brasileños “altamente radicalizados” a los que sigue.
Expansión del zika por los JJOO
El epidemiólgo y expresidente de Médicos sin Fronteras en España Pedro Arcos advertió el lunes del riesgo de que el virus del Zika se extienda por regiones del mundo donde todavía no existe, debido a los Juegos Olímpicos que se van a celebrar en Río de Janeiro el próximo mes de agosto.
“Parece que hubiéramos escogido el peor de los sitios posibles para montar esta historia” , advirtió Arcos, que actualmente es el director de la Unidad de Investigación de Emergencias y Desastres del Departamento de Medicina de la Universidad de Oviedo (norte) .
Río de Janeiro es la segunda zona de Brasil donde mayor transmisión de zika se registra con más de 25 mil casos de personas infectadas y más tres mil 200 de microcefalia confirmados, recordó este experto, que participó hoy en un encuentro sobre periodismo y situaciones de crisis.
A su juicio, el principal problema es que se va a introducir a medio millón de personas que vienen de una variedad enorme de países donde el virus no está presente, como el sudeste asiático o frica, y cuando vuelvan a su casa, una parte regresará infectada.
El hecho de que el zika se transmita por mantener relaciones sexuales supone que esas personas que viajen a Río de Janeiro tendrán que tomar medidas adicionales si vuelven infectadas y si proceden de países donde no hay mucho control en las transfusiones de sangre, “pues también aumentarán las posibilidades de expansión” .