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Crisis en Nicaragua: qué dice la carta del exjefe del Ejército a su hermano, el presidente Daniel Ortega, un mensaje que fue elogiado por la oposición

Quienes un día lideraron juntos el sandinismo que logró derrocar a Anastasio Somoza en 1979, hoy tienen posiciones radicalmente enfrentadas sobre cómo gobernar Nicaragua.

Humberto Ortega, exjefe del Ejército y hermano del presidente Daniel Ortega, volvió a dejarlo claro en un contundente mensaje en el que exigió al mandatario medidas concretas para salir de la crisis que vive Nicaragua desde abril de 2018 y que dejó cientos de muertos y decenas de miles de exiliados.

En una carta publicada este miércoles en el diario La Prensa, el general retirado pidió al mandatario liberar a “los prisioneros de esta crisis política” y apostó por la celebración de unas “elecciones libres”.

El gobierno nicaragüense no se pronunció al respecto, si bien el presidente Ortega no oculta sus discrepancias con su hermano y el año pasado lo acusó de ser “un peón de la oligarquía y del imperio”.

¿Qué dice la carta?

En la carta, Humberto Ortega llama al Ejecutivo a dar “pasos sabios, firmes y justos” como la liberación de personas encarceladas en el marco de este conflicto.

“Que el gobierno apele a mecanismos legítimos que permitan a los prisioneros de esta crisis política estar libres”, abogó el general retirado.

El hermano del presidente defendió su propuesta al considerar que “esta justa decisión dará ánimo para la lucha cívica y electoral lejos de la violencia y la destrucción, libertad plena que critica el poder establecido, el autoritarismo, ir recuperando la economía”.

Protesta en Nicaragua
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Humberto Ortega pidió a su hermano liberar “a los prisioneros de esta crisis política”.

“En estos momentos, su gobierno, presidente Ortega, tiene la oportunidad para un gesto justo hondamente humanista, agilizando trámites para la libertad de los encarcelados”, emplazó directamente a su hermano.

“Así gane quien gane las elecciones libres pueda con menos dificultades convocar un Acuerdo Nacional que sustente debidamente su programa de gobierno”, agregó.

BBC Mundo contactó con Humberto Ortega para conocer más detalles de su posición, pero su equipo de colaboradores aseguró que no está ofreciendo entrevistas e insistió en que “uno de sus objetivos inmediatos es contribuir a la libertad de los presos políticos”.

Nicaragua vive una crisis social y política desde hace más de año y medio protagonizada por protestas ciudadanas que exigen la renuncia de Ortega tras 12 años consecutivos en el poder y denuncian la violencia con que fueron reprimidas, que dejó entre 300 y 650 muertos, según organismos de derechos humanos.

Naciones Unidas y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos responsabilizaron al gobierno de graves abusos a manifestantes y opositores como torturas y ejecuciones extrajudiciales.

Daniel Ortega negó las acusaciones y aseguró que se trata de un intento de “golpe de Estado” en su contra.

¿Cuáles fueron las reacciones al mensaje?

La oposición en Nicaragua valoró positivamente el mensaje de quien hace décadas fuera mano derecha de Daniel Ortega.

El empresario y miembro de la organización opositora Alianza Cívica, Mario Arana, dijo que la carta fue “una contribución valiosa” de “una figura que ha jugado un papel histórico” en el país.

“Yo diría que haría bien el presidente Ortega en escucharla”, declaró al diario La Prensa.

Murillo y Ortega
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La oposición recomendó a Daniel Ortega seguir las recomendaciones de su hermano Humberto.

“Humberto está poniéndole a (Daniel) Ortega un puente, por eso es que hace esa larga explicación histórica, para darle un sustento y para decirle: aquí hay un puente por donde te podés apear”, dijo al mismo medio la exguerrillera sandinista Dora María Téllez, aliada del presidente en el pasado.

Sin embargo, desde el oficialismo restaron importancia al mensaje al considerar que su petición principal no tiene “ninguna base real”.

“Ortega liberó a 170 terroristas que habían incendiado alcaldías, casas de sandinistas, radios… No hay un solo preso político en Nicaragua”, rechazó el exguerrillero sandinista Edén Pastora.

En conversación con BBC Mundo, el históricamente conocido como Comandante Cero admitió haberse “sorprendido” por la carta de Ortega. “Definitivamente, tendrá una razón poderosa económicamente para decir las barbaridades que dijo”, afirmó.

En su opinión, lo único que hay en las cárceles de Nicaragua son delincuentes comunes. “Si Humberto y los antisandinistas quieren que el presidente libere a 5.000 o 7.000 asaltantes, criminales, violadores… no los vamos a liberar nunca”.

La Asociación de Familiares de Presos Políticos de Nicaragua, por su parte, cifra en al menos 168 las personas que permanecen encarceladas en el marco de la actual crisis.

¿Cuál es la relación entre los hermanos Ortega?

Humberto Ortega fue uno de los “nueve comandantes” de la Revolución sandinista que lideraron la lucha contra el gobierno militar de la familia Somoza en Nicaragua.

Tras su triunfo en 1979, fundó y fue primer comandante en jefe del Ejército Popular Sandinista hasta su salida en 1995. También fue ministro de Defensa entre 1979 y 1990.

Su hermano Daniel era otro de los comandantes que integraban la Dirección Nacional del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) y, pese a que no destacaba particularmente, fue propuesto por Humberto como coordinador de la Junta de Gobierno para garantizar así el equilibrio de poder.

Daniel y Humberto Ortega
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Daniel y Humberto Ortega estuvieron al frente de la presidencia y el Ejército de Nicaragua, respectivamente, aunque hoy su relación es inexistente.

“Humberto vendió la idea diciendo que Daniel, por falta de relevancia, no era el más peligroso, alguien que quisiera o pudiera hacerse con el poder, porque no sabía hablar, no era carismático. Esa fue la manera de venderlo”, le dijo a BBC Mundo en 2016 el novelista Sergio Ramírez, vicepresidente de Ortega de 1984 a 1990.

Con Daniel en la presidencia y Humberto al frente del Ejército, sin embargo, el poder del primer comenzó a crecer hasta que los sandinistas perdieron el poder en 1990.

Entonces llegaron las divisiones en el partido y también las discrepancias entre los dos hermanos, que aumentaron cuando Humberto decidió seguir al frente del Ejército en el nuevo gobierno de Violeta Barrios de Chamorro.

Daniel Ortega volvería al poder en 2007, pero el distanciamiento con su hermano -al igual que con otros reconocidos exguerrilleros sandinistas- era ya insalvable.

Humberto Ortega
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Humberto Ortega fue jefe del Ejército Popular Sandinista entre 1979 y 1995.

Su mala relación en la actualidad es más que pública. En julio del año pasado, Humberto responsabilizó al gobierno liderado por su hermano de la actual crisis, pidió elecciones anticipadas y que pusiera fin a las acciones de grupos paramilitares.

“El principal responsable de la situación que estamos viviendo es el Estado de Nicaragua”, dijo durante una entrevista en CNN en español.

Daniel Ortega respondió duramente a su hermano, a quien acusó de “pasarse al lado de los que habían ganado las elecciones” (en 1990) y de “convertirse en peón de la oligarquía y del imperio”.