En plena exhibición aérea
A su llegada a la capital andaluza, el aparato de largas alas y silueta ultrafina fue recibido con un desfile de aviones de caza y una patrulla de las fuerzas aéreas españolas.
“Llegué en medio de un exhibición aérea, fue absolutamente extraordinario, me mantuvo despierto” , le respondió Piccard al príncipe de Mónaco.
Y, después de aterrizar, el piloto lanzó un eslogan. “¡El futuro es limpio y empieza ahora!” , dijo alabando la eficacia de las nuevas tecnologías sostenibles para preservar los recursos naturales del planeta.
“Que la aviación comercial funcione con energía solar está todavía muy lejos. Pero todas estas tecnologías se pueden aplicar en tierra” , explicó.
El proyecto se financia gracias a la colaboración de empresas privadas y los donativos de particulares.
El avión debe todavía hacer una etapa en Egipto ante de volver a Abu Dhabi, en los Emiratos rabes Unidos, de donde partió el 9 de marzo de 2015, haciendo después sucesivas escalas en Omán, India, Birmania, China, Japón y Estados Unidos.
El suizo Piccard proviene de una familia de científicos, inventores y aventureros. Su abuelo Auguste inspiró al belga Hergé para crear el personaje del profesor Tornasol de la serie del intrépido periodista Tintín.
En esta vuelta al mundo, Piccard alterna el pilotaje con su compatriota André Borschberg, de 63 años, otro aventurero y defensor de las energías limpias.
Este último había pilotado el monoplaza durante su etapa más larga, entre Nagoya, en Japón, y el archipiélago estadounidense de Hawái en el Pacífico: 8.924 kilómetros en cinco días y cinco noches, el vuelo más largo de la historia de la aviación.
Después, el avión había sido inmovilizado en Hawái durante diez meses para una puesta a punto, en particular de sus baterías, antes de retomar el vuelo sobre Estados Unidos.
El aparato sólo pesa 1,5 toneladas, pero de un extremo al otro de sus alas mide 63 metros, como los aviones comerciales mas grandes del mundo, tipo Boeing 747. Esta hecho de fibra de carbono y es apodado “paper plane” (avión de papel) .
Vuela a una velocidad media de 50 km/h gracias a sus baterías de litio que almacenan la energía solar captada por 17.000 células fotovoltaicas instaladas en las alas.
Los dos pilotos anunciaron este jueves la creación de un Comité Internacional de las Energías Limpias, destinado a convertirse en “un interlocutor creíble para quienes necesiten saber cómo utilizar estas tecnologías” .