Primero un automóvil cargado con explosivos, manejado por un atacante suicida, embistió la entrada del hotel y estalló, lo que permitió la llegada de los agresores que dispararon contra los guardias de seguridad, dijo el capitán Mohamed Husein.
El grupo islamista Al Shabaab reivindicó el ataque, según la radio pro-insurgente Andalus.
Hombres armados de Al Shabaab irrumpieron en el hotel SYL, en el centro de Mogadiscio, luego de detonar un carrobomba en las puertas del establecimiento, dijeron a dpa autoridades y testigos de la capital somalí.
Al menos cinco milicianos y dos guardias fueron murieron durante el ataque, indicó el oficial de seguridad Mohamed Hassan. No está claro si esas muertes forman parte del recuento de 20 víctimas.
Se escucharon disparos de armas de fuego en el hotel SYL, frecuentado por funcionarios de gobierno, empresarios y ciudadanos extranjeros. El hotel está localizado cerca del fuertemente custodiado palacio presidencial.
Una segunda explosión, presuntamente otro carrobomba, se escuchó en el mismo área poco tiempo después de la primera explosión, dijo el oficial militar Abdullahi Madobe.
Al menos ocho personas fueron trasladadas al hospital, dijo un funcionario del hospital Madina.
La primera explosión fue muy fuerte y se cree que causó varias víctimas civiles. También afectó a unos 25 edificios de la zona, incluidas casas, restaurantes y hoteles.
Se cree que varios cuerpos permanecen bajo los escombros, mientras varios equipos de rescate trabajan en el área.
El año pasado Al Shabaab perpetró un ataque suicida con un coche bomba contra el mismo hotel mientras delegados turcos preparaban la visita del presidente Recep Tayyip Erdogan. Quince somalíes murieron.
La milicia terrorista, que busca la creación de un estado islámico en Somalia y está vinculada con la red terrorista Al Qaeda, ataca con frecuencia edificios del Gobierno en Mogadiscio.
El atentado se produce solo un día después de que la sede del Gobierno somalí sufriera un ataque con morteros en el que murieron ocho personas.
Al Shabab, que se adhirió formalmente a Al Qaeda en el 2012, lucha para instaurar un Estado islámico de corte wahabí en Somalia