No hay otros sospechosos de haber participado en el ataque cometido en el centro comercial Cascade Mall de Burlington, donde murieron cuatro mujeres y un hombre, añadió el portavoz.
En un principio, la policía había descripto al atacante como un hombre hispano de alrededor de 20 años.
Una página de Facebook, presentada como perteneciente al detenido, indica que Arcan Cetin nació en Adana, la cuarta ciudad de Turquía ubicada al borde del Mediterráneo. El joven cursó sus estudios en Oak Harbor y trabajaba en una tienda de ultramarinos en Widbey Island, otra localidad del Estado de Washington.
La policía federal, el FBI, precisó que hasta el momento no hay ningún indicio de que se haya tratado de un “acto terrorista”.
Un arma fue encontrada en el lugar de los hechos, pero el atacante, moreno y vistiendo una camiseta y pantalones cortos negros según las imágenes de las cámaras de seguridad del centro comercial, se había dado a la fuga a pie, desatando una intensa cacería por parte de las fuerzas de seguridad.
“Es un acto sin sentido”, dijo el alcalde de la ciudad Steve Sexton, al expresar su consternación por ver a su comunidad golpeada por un nuevo incidente de violencia con armas de fuego en Estados Unidos, donde hay un creciente debate sobre el control de armas, uno de los temas candentes de la campaña hacia las elecciones presidenciales del 8 de noviembre.
“No sé cuáles eran sus motivaciones”, comentó por su lado a la prensa el teniente Chris Cammock, de la policía de la localidad vecina de Mount Vernon.
Efectivos de varias agencias policiales y perros entrenados participaron activamente en las operaciones de búsqueda del sospechoso.
“Un disparo tras otro”
Testigos dijeron a la cadena KOMO News que el atacante entró caminando a un local de las tiendas Macy’s y directamente abrió fuego con un rifle sobre las personas allí presentes.
“Oí un disparo y después me quedé parado un momento y (vi) dos o tres personas que empezaron a salir corriendo gritando ‘armas’ y después (oí) un disparo tras otro”, dijo Armando Patino, que trabaja en una tienda de teléfonos celulares del centro comercial.
“Giré y corrí hacia la tienda. Algunas personas no sabían a dónde ir y las hice entrar en la tienda”, añadió. “Nos fuimos al fondo donde hay una puerta (…) y nos quedamos ahí hasta que nos dijeron que evacuáramos” el lugar, agregó.
La oficina del FBI de Seattle dijo que estaba colaborando con las autoridades locales y había enviado refuerzos para ayudar en la búsqueda del atacante.
El centro comercial informó que permanecería cerrado este sábado en honor a las víctimas.
“Estamos muy entristecidos por los trágicos hechos de esta noche (del viernes). Nuestras oraciones y condolencias para las víctimas y sus familias”, indicó el centro comercial en un mensaje en Facebook.