Fue Ceballos, a nueve minutos del pitazo final, quien marcó el gol más esperado por 14 millones de guatemaltecos y que sentenció el triunfo 1-0 sobre los croatas, en la última jornada del Grupo F del certamen, que se realizó en Colombia.
El resultado dio al combinado guatemalteco sus primeros tres puntos en una justa mundialista y le sirvieron para sellar su clasificación a los octavos de final, en los que enfrentaría a Portugal, selección que eliminaría al combinado azul y blanco.
Sin embargo, no existen muchos adjetivos para definir lo conseguido ese 6 de agosto por los jugadores nacionales, que escogieron el lugar y el mejor momento para jugar como no lo habían hecho en los partidos anteriores, contra Nigeria (0-5) y Arabia Saudita (6-0).
Armenia, conocida como la Ciudad Milagro, fue escenario de eso mismo, un milagro que convirtió al combinado azul y blanco en uno de los 16 mejores del planeta para la categoría.