Una publicacio?n que se editaba en Estados Unidos publico? años atrás un estudio para demostrar que el cargo de vicepresidente ha sido, en la Ame?rica Latina, una fuente de problemas y citaba numerosos casos en los cuales el vicepresidente habi?a dejado el cargo, o bien habi?a ascendido a la presidencia. El arti?culo se titulaba “Cuidado con la vicepresidencia”.
Pero lo problema?tico de ese cargo no es patrimonio de los regi?menes latinoamericanos, tambie?n Estados Unidos lo había padecido, como en el caso del sen?or Spiro Agnew, quien fue obligado a renunciar, so pena de ir a parar a la ca?rcel.
El doctor Villagra?n Kramer fue seleccionado por el general Fernando Romeo Lucas Garci?a como su compan?ero de fo?rmula en las elecciones de 1978, con el propo?sito de formar un gobierno de centro – izquierda. Ganaron la eleccio?n.
Pero desde los primeros meses de gobierno trascendieron fricciones entre el vicepresidente y algunos ministros, especialmente con el de relaciones exteriores. Villagran Kramer fue acusado de querer intervenir en la conduccio?n de la poli?tica exterior.
El vicepresidente haci?a declaraciones en Guatemala y en el extranjero sobre esa materia y los perio?dicos registraron, en su oportunidad un “tiquis-miquis” entre el vice y el canciller. Con motivo de un viaje del presidente Lucas Garci?a al extranjero, Villagra?n Kramer asumio? las funciones de presidente. Convoco? a una junta de gabinete y so?lo algunos ministros atendieron la convocatoria. La inadecuacio?n del vicepresidente en el equipo de gobierno principiaba a marcarse.
Un di?a de tantos anuncio? su propo?sito de renunciar y dijo que el “esquema poli?tico” en el que se habi?a comprometido a trabajar “habi?a fracasado” y que, por ello, no le quedaba otro camino que dejar el cargo.
Siguieron a esa declaracio?n otras ma?s y repentinamente, el doctor Villagra?n Kramer dio a conocer una informacio?n atribuida al Instituto de Estudios Latinoamericanos —con sede en Estados Unidos—, segu?n el cual, el vicepresidente en caso de renunciar no podri?a quedarse en el pai?s, porque su vida correri?a peligro.
El ambiente poli?tico experimento? con esas declaraciones sus primeros alborotos. Un comentarista escribio? en el diario El Imparcial, que la renuncia del doctor Villagra?n no era un problema de importancia, pero todo depende —deci?a el periodista— de si Pancho se marcha haciendo bulla o si lo hace en silencio.
En los meses que siguieron, se le preguntaba a menudo al doctor ViIlagra?n Kramer cua?ndo enviari?a al congreso de la repu?blica su renuncia y un di?a, exasperado, respondio?: ¿No hay en el pai?s otras cosas ma?s importantes de que? ocuparse?
De todas maneras, el vicepresidente continuo? sus frecuentes viajes al exterior y despue?s de uno de ellos dijo que “presidentes de pai?ses europeos, consultados sobre su renuncia, habi?an manifestado preocupacio?n”.
—Lo u?nico que resta —dijo una vez Villagra?n Kramer— es determinar' “el lugar y la oportunidad de la renuncia”. En otra oportunidad llamo? por tele?fono a un periodista y le dijo: “Imagi?nese usted que en el PR y en el PID esperan mi renuncia como un regalo de Navidad”.
Y los viajes al exterior continuaban. Se rumoreaba que el doctor Villagra?n se iba del pai?s unos di?as antes de que ocurriera algu?n acontecimiento poli?tico importante.
Uno de esos viajes —el realizado a Panama?— provoco? debates en el Congreso, pues algunos diputados afirmaban que habi?a salido del territorio centroamericano sin solicitar el correspondiente permiso. El vice tuvo para ello la correspondiente respuesta.
El u?ltimo y controvertido viaje fue el que culmino? con la renuncia. Habi?a solicitado permiso para viajar al exterior “por motivos de salud”, pero diputados bien enterados de los pasos del vicepresidente encontraron que habi?a estado en Panama? (otra vez) participando en una reunio?n de li?deres poli?ticos latinoamericanos de tendencia socialdemo?crata.
De repente el doctor Villagra?n Kramer resulto? en tierras del Ti?o Sam. ¿Que? haci?a por aquellos lares?
Principiaron nuevamente las conjeturas y, la semana anterior, algunos diputados manifestaron su creencia de que el vicepresidente teni?a el propo?sito de ya no volver. Comenzaron a contar di?a a di?a el tiempo que faltaba para que expirara el permiso que le concediera el Congreso, para permanecer fuera del territorio nacional.
Esos legisladores habi?an detectado que, uno por uno, los miembros de la familia del vicepresidente dejaron el territorio nacional rumbo a Estados Unidos.
El caso culmino? el 1 de septiembre cuando dos periodistas vieron llegar al congreso de la repu?blica a un funcionario de la vicepresidencia. Minutos despue?s, un diputado les dijo: “Lo que ha trai?do es la renuncia de Villagra?n Kramer”.
Un poco ma?s tarde los periodistas teni?an en sus manos los textos de la renuncia y del mensaje al presidente de la repu?blica, debidamente sellados por instituciones oficiales.
Mensaje a Lucas
Desde Washington DC, el vicepresidente Villagrán Kramer envió un mensaje personal al presidente Lucas por medio del Telex la mañana de ese día con el siguiente texto:
TELEX 292
Primeras horas de la man?ana di?a 1 septiembre 1980
Presidente de la repu?blica General Romeo Lucas Garci?a Casa Presidencial
Permi?tome comunicarte he tomado decisio?n renunciar vice-presidencia de la repu?blica remitiendo congreso texto correspondiente punto siendo pra?cticamente imposible resolver mediante dia?logo privado contigo las diferencias de opinio?n es preferible mi retiro desde aca? para evitar discusiones prensa exho?rtote reconsiderar programa inicial e ideas compartimos originalmente durante campan?a electoral y toma posesio?n efecto restablecer posibilidades compromiso paz entre guatemaltecos punto personalmente siento he cumplido mi deber hacia la patria y hacia ti como presidente con honradez lealtad y patriotismo.
Francisco Villagra?n Kramer Vicepresidente de la repu?blica
Sustituto
Por su parte el Presidente Lucas García por medio de su secretario de relaciones públicas, Carlos Toledo Vielman indicó que la renuncia de Villagrán Kramer no debía ser motivo de escándalo y preocupación y que la misma podría ser utilizada por los enemigos del país para proseguir con la campaña de desprestigio en el exterior contra Guatemala.
Esa declaración fue por los señalamientos de violaciones a los derechos humanos y a la persecución y represión de los movimientos sociales en especial en el área urbana del país. Motivo por el cual también provocó la renuncia del vicepresidente Villagrán Kramer quien estaba en desacuerdo con la política contrainsurgente de Lucas.
El Congreso de la República en una sesión récord eligió a Óscar Mendoza Azurdia, como sustituto de Villagrán Kramer. Azurdia había sido miembro del ejército de liberación comandado por Carlos Castillo Armas y que había derrocado al presidente Jacobo Árbenz Guzmán en 1954 y durante el régimen de Lucas se desempeñaba como primer vicepresidente del Consejo de Estado.
El presidente Lucas García tampoco completaría su periodo presidencial ya que un golpe de Estado lo separaría del poder el 23 de marzo de 1982.
Perfil
- Francisco Villagrán Kramer nació en la capital, el 5 de abril de 1927.
- Estudió Derecho Internacional en Estados Unidos, Chile, Guatemala y Cuba.
- Se graduó de licenciado en Derecho por la Universidad de San Carlos, y obtuvo un doctorado en Suiza.
- Representó a Guatemala en reuniones de la ONU, la OEA y la Conferencia Internacional del Trabajo, entre otros cargos.
- Presentó disertaciones en Italia, EE. UU., Canadá y Suiza, y fue profesor en 14 países, en América y Europa.
- Fue diputado de 1958 a 1962 y de 1994 a 1996.
- Vicepresidente de la República, de 1978 a 1980, cuando renunció luego de acusar al gobernante Romeo Lucas de violar los derechos humanos.
- Hizo 45 publicaciones y recibió múltiples galardones.
- Falleció en Guatemala el 12 de julio de 2011.