El minero Ramiro Figueroa fue quien vio caer el avión en la zona del cerro El Planchón. Al ser preguntado dijo que vio caer la aeronave a tierra, envuelta en llamas.
Entre los pasajeros del avión perdido se encontraban Eduardo y Adolfo Strauch, sobrinos del presidente uruguayo Juan María Bordaberri, que integraban el equipo de rugby, así como el hijo del conocido pintor Carlos Páez Vilaro.
25 de octubre 1972
El servicio aéreo de Chile decidió suspender la búsqueda del avión extraviado, el cual se suponía que se había estrellado en una de las montañas más altas de la cordillera de Los Andes.
El avión perdió todo contacto; su último reporte fue en las cercanías de la ciudad chilena de Chicoerk, en cuyo sector cordillerano se cree que se precipitó el aparato.
La búsqueda, en la cual tomaron parte también helicópteros, un aparato de la fuerza aérea uruguaya, aviones de clubes civiles chilenos y argentinos, además de patrullas terrestres, se reinició en la época de los deshielos, en dos meses más, aproxi- madamente.
Los cuerpos de salvameto de Argentina Uruguay y Chile informaron que el avión posiblemte se encontraba sepultado por la nieve, que en forma intensa caía en esos momentos.
Los 16 sobrevivientes
Los únicos que sobrevivierón al accidente permanecieron 69 días bajo un intenso frio, a una altura de 6,000 metros del nivel del mar.
Los primeros seis sobrevivientes del avión uruguayo arribaron a San Fer?nando (Chile) a bordo de un helicóptero.
Los sobrevivientes dijeron que el accidente había ocurrido exactamente hacía 70 días cuando, volando a baja altura, el aparato tocó un risco y se precipitó a tierra.
Ese día se dio a conocer la lista extraoficial de sobrevivientes, entre los cuales estaban Carlos Miguel Páez Rodríguez, Roberto Alvarez Francois, Roy Harley Sánchez, Alfredo Salaverry Delgado, Alvaro Smith Man, José Pedro Algorta Durán, Antonio Brandy Vicentín, Fernando Parrado Dolgay, Eduardo Strauch Urioste, Adolfo Strauch Urioste, Gustavo Cerviño Staja no, Roberto Canessa Urta, José Luis Inciarte, Daniel Strauch Fernández, Javier Abal Methol y Ramón Sabella.?
El rescate de los dos primeros sobrevivientes dio lugar a que nuevas patrullas encontraran los restos del aparato, y donde estaban los otros sobrevivientes. Esto fue determinte para dar con los demás. Estos dijeron a sus rescatistas que para vivir utilizaron el combustible que quedaba entre los restos del avión y la comida que todavía se encontraba a bordo.
Tiempo después trascendió que los sobrevivientes se habían comido partes de sus compañeros muertos, aunque ninguno de ellos lo había admitido antes.
Entierran a las víctimas
Una patrulla del servicio de socorro andino, dos oficiales de la fuerza aérea de Uruguay y un sacerdote católico procedieron a la inhumación de las 29 víctimas del avión uruguayo que cayó en una ladera del volcán Tinguiririca, casi en la frontera con Argentina.
Los restos de las víctimas fueron trasladados a un terreno firme donde se procedió a darles sepultura, mientras los heridos fueron llevados a distintos centros hospitalarios para que se recuperaran, pues presentaban síntomas de hipotermia y desnutrición, según informaron en aquella ocasión las autoridades de los tres países que colaboraron en la búsqueda y rescate.
Video de la tragedia de Los Andes (tomado de Youtube)
