Fernando Urquizú, del Centro de Estudios Folclóricos (Cefol), explicó que hay varias razones por las que estas ciudades fueron bautizadas con el nombre de este personaje. Una de estas es porque fue elección de las órdenes religiosas que las evangelizaron, como los franciscanos en San José Poaquil, Chimaltenango.
Según el experto, las órdenes religiosas escogen a un santo en particular, como los franciscanos a San Francisco, pero todas pregonan a San José como el jefe de la Iglesia Católica. Así, los dominicos, que veneran a Santo Domingo, bautizaron con el nombre del padre de Jesús a San José Pinula, Guatemala.
Otra causa de esta onomástica josefina es cuando la advocación es venerada por el cacique o gobernante que estableció el pueblo, como el presidente Rafael Carrera en el Puerto de San José. También influyó que el poblado haya sido integrado en marzo, dedicado a San José en la liturgia católica.
Figura paterna
Urquizú refirió que la figura de San José se convirtió en un ejemplo a seguir, porque en los Evangelios es presentado como un hombre justo, obediente a Dios y protector del Niño Jesús y de la Virgen María. “Representa un papel socialmente aceptado para los varones”, expuso.
La importancia de San José en la Iglesia Católica quedó manifiesta en 1870, cuando el papa Pío IX lo declaró patrono y protector de la Iglesia Universal.
Desde entonces, sus imágenes han sido investidas con una corona real, aunque se continúa representando en iconografías sencillas, junto a la Virgen María o con el Niño Dios en sus brazos, como miembro de la Sagrada Familia y que maniobra una herramienta de carpintero.
Anécdotas
Miguel Álvarez, director del Museo Nacional de Historia, recordó que Rafael Carrera llamó al fuerte de San José de Buena Vista, porque un 19 de marzo derrotó a Francisco Morazán, en la batalla de La Arada.
En 1852, Carrera ordenó el traslado del puerto de Iztapa a la finca El Zapote, a la que nombró San José, lugar que fue elevado a la categoría de municipio en 1920. “Es interesante resaltar que el nombre completo del dictador era José Rafael Carrera”, comentó el historiador.
Álvarez mencionó que a la campana más grande del país, que pesa cuatro mil libras y que se encuentra en la Catedral, se le conoce como La Chepona. “Fue fundida con bronce de los cañones del fuerte de San José, en 1871, para celebrar el Concilio Vaticano I”, agregó.
El experto expuso que anteriormente en las imágenes de San José se grababa las siglas PP, de padre putativo —de Jesús—, por lo que en Iberoamérica, la gente empezó a llamar pepes a quienes tienen ese nombre. Añadió que el primer templo inaugurado en la Ciudad de Guatemala de la Asunción fue la parroquia de San José, en la 5a. calle y 12 avenida de la zona 1, en 1783, por el gremio de los carpinteros.
Una catedral a San José
Cuando la Ciudad de Guatemala fue trasladada al Valle de la Asunción, la Catedral de Antigua pasó a llamarse iglesia de San José; después recobró su calidad de catedral, pero conservó el nombre del patrono. Como en Antigua ya había una parroquia con el nombre de este santo —en 5a. avenida sur—, los vecinos llamaron a este templo la Ermita de San José el Viejo.
De acuerdo con Álvarez, cuando la ermita empezó a ser edificada, en 1740, y la solicitud para su autorización fue escrita sin prisa, las autoridades superiores no la autorizaron y ordenaron su destrucción; sin embargo, no se cumplió la orden, y en 1751, cuando la ciudad fue devastada por un terremoto, la ermita se mantuvo intacta. Ocho años más tarde, las autoridades eclesiásticas autorizaron su edificación y fue terminada.
Lucha anticomunista
La figura de San José es representada de varias maneras en la fe católica; una es la de José el Soñador, pues durante un sueño recibió el mandato divino de convertirse en el padre adoptivo de Jesús; otra, es la de San José Obrero, modelo de los trabajadores manuales, ya que en la Biblia, San Mateo y San Marcos lo llama tekton, que en griego significa albañil o carpintero.
Fernando Urquizú recordó que en 1937, el Papa Pío XI, en su encíclica Divini Redemptoris, utilizó la figura de San José Obrero en contra del comunismo ateo e instituyó su festejo el 1 de mayo, Día del Trabajo.
San Lucas lo menciona en dos ocasiones; San Marcos no dice su nombre, pero se refiere una vez al carpintero; mientras que San Mateo y San Lucas, que relatan la infancia del Niño Jesús, lo tratan como un hombre justo establecido en Nazaret.
Sin embargo, en ninguno de los Evangelios San José se expresa por sí mismo, y por ello también es conocido como el santo de los mudos.
En aldeas y cantones
En Guatemala también existen aldeas, barrios y templos que han sido fundados en su nombre. Por ejemplo, en Palín Escuintla, uno de los cuatro barrios en que se divide la ciudad se llama San José. En Salamá, Baja Verapaz, hay una iglesia con ese nombre; en Retalhuleu se encuentra la colonia San Josecito, en la zona 3 de la cabecera.
Aún así, no en toda partes celebran la feria el 19 de marzo. En San José Chacayá, Sololá, la cofradía rinde honor a este santo, pero si la verbena cae dentro del tiempo de cuaresma, la fiesta se pospone hasta después de Semana Santa, con la vigilancia del párroco local.
San José es patrón de las siguientes localidades:
- San José Poaquil, Chimaltenango
- San José La Arada, Chiquimula
- Puerto de San José, Escuintla
- San José del Golfo, Guatemala
- San José Pinula, Guatemala
- Morales, Izabal
- El Asintal, Retalhuleu
- San José Ojetenam, San Marcos
- San José el Rodeo, San Marcos
- San José Chacayá, Sololá
- San José El Ídolo, Suchitepéquez