O'Connor se disponía a cantar la canción “War” de Bob Marley, que pretendía ser una protesta por los abusos sexuales de sacerdotes de la iglesia católica, cambiando la palabra “racismo” por “abuso de menores”. Luego presentó una foto de Juan Pablo II a la cámara mientras cantaba la palabra “evil” (maldad); después de romper la foto en pedazos, pronunció la frase “lucha contra el verdadero enemigo” y arrojó la foto en pedazos a la cámara.
El conmutador de NBC se vió atiborrado con decenas de llamadas de protesta por el hecho. Esto provocó la ira de muchos sectores conservadores de Estados Unidos, calificando a O'Connor como una necesitada de ayuda profesional y espiritual. El periódico New York Daily News la calificó como “Terror – Santo” en el informe publicado al día siguiente en primera plana.
La furia generalizada amenazó con superar ampliament las protestas de dos años antes cuando la cantante rapada de 25 años en ese entonces, cuando intentó cancelar un concierto en Nueva Jersey si se tocaba el himno nacional estadounidense “The Star-Spangled Banner”. Los organizadores del espectáculo accedieron a sus demandas por temor a disturbios de miles de simpatizantes si no lo hacían.
“No me arrepiento”
Semanas después del incidente, O'Connor tuvo un recimiento hostil durante un concierto en homenaje a Bob Dylan al ser abucheada cuando apareció en el escenario del concierto tributo en el Madison Square Garden. En vez de interpretar la canción de Dylan que tenía programado cantar, Sinead cantó la versión de “War” interpretada en Saturday Night Live y abandonó el escenario.
La vocera Elaine Shock dijo a los medios que Sinead O'Connor “no se arrepiente de nada” con respecto a sus acciones, porque sintió que la multitud no le permitiría cantar. Shock manifestó su desencanto por la falta de apoyo a Sinead y señaló: “Es horrible que alguien a quien realmente le gusten las canciones de Bob Dylan la abuchée”.