Detalles de percances
Un avión de Aviateca se estrelló el 9 de octubre de 1954 en terrenos de la colonia La Florida, zona 19.
El aparato salió de Carmelitas Petén, llevando abordo a siete pasajeros, entre ellos un bebé y la tripulación quienes se salvaron de morir. La aeronave estaba piloteada por el coronel Marco Antonio Asturias, y llevaba como copiloto al teniente René Sarmientos.
Los pasajeros fueron identificados como Manuel Aquino, Eduardo Díaz, Héctor Maza, Dionisio Cambranes y la esposa de éste, y Francisco Castellanos Manzaneros y su pequeño hijo Diego Francisco Manzaneros Ruiz, de dos meses.
El accidente ocurrió cuando el avión llegó a la ciudad y encontró el campo de aviación cerrado.
Sin visibilidad, dio varias vueltas sobre la ciudad sin poder aterrizar, por lo cual enfiló hacia el Aeropuerto La Aurora.
Asturias se comunicó a la torre de control del aeropuerto y dio cuenta de los angustiosos momentos que estaban viviendo. De pronto, se precipitó contra los campos de La Florida y antes de caer pasó destrozando el techo de una casa, y posteriormente se estrelló contra la casa de Francisco Alvarez, la cual quedo totalmente destruida.
En la vivienda se encontraba el bebé de ocho meses identificado como Luis Francisco Álvarez, quien salió ileso.
Una versión del accidente fue que el avión con matricula TGAJA, de Aviateca, al darse cuenta de que el aeropuerto La Aurora estaba cerrado debido a la neblina, aprovechó un claro y decidió echar la nave a tierra en un aterrizaje forzoso.
Habitantes asustados
El violento aterrizaje dejó destrozados los motores, hélices, el ala derecha y otras partes del avión.
Numerosos vecinos de La Florida llegaron al sitio del percance para ayudar a los ocupantes.
Cuando llegaron, se abrió la portezuela del avión por donde comenzaron a salir los atemorizados pasajeros. El primero en salir fue el señor Héctor Maza.
Al poco tiempo comenzó a llegar el auxilio de la propia colonia, entre ellos guardias civiles y ambulancias que solo se limitaron a atender a los ocupantes a quienes les dieron agua por el susto.
CasaS dañadas
Tres casas fueron las más dañadas al producirse el accidente debido a que fueron totalmente destruidas: una era del señor Wilfredo Batres, situada en la 5a avenida; la del señor Luis Cojulún y la de Francisco Álvarez Carrera.
El coronel Rodolfo Mendoza, entonces presidente de Aviateca, informó que el avión estaba en perfectas condiciones por lo que el piloto había procedido con conciencia y sentido de responsabilidad al realizar el aterrizaje forzoso, y que había sido la manera más segura para evitar una tragedia mayor.
17 de diciembre 1953
El avión Landívar, un aparato C-46 Curtis de dos motores propiedad de la empresa guatemalteca de aviación AVIATECA parte del aeródromo de Brownsville, Texas Estados Unidos, con destino a Guatemala. Venía con un cargamento de frutas y mercadería navideña.
Cuando pasaba a inmediaciones de la aldea Xepan , en el municipio de Tecpán Chimaltenango, cayó a tierra y se destrozó por completo.
Los restos del aparato quedaron esparcidos sobre un cerro de unos ocho mil pies de altura, perdiendo la vida los experimentados pilotos, el teniente coronel Richard Davis, de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, y el teniente Arturo Mirón Flores, de la Fuerza Aérea Guatemalteca.
El último vuelo
Cuando el aparato volaba a la altura de Huehuetenango, los pilotos se comunicaron con la torre de control del Aeropuerto la Aurora, a la que pidieron que encendiera las luces de la pista porque aterrizarían en 15 minutos.
Al ver que pasaban los minutos y el avión no llegaba, la primera impresión que tuvo la torre de control fue que el aparato había sufrido un accidente, por lo cual dieron órdenes a los pilotos de la Fuerza Aérea para que realizaran vuelos de búsqueda del avión, que se dio por perdido.
Debido a la poca visibilidad se suspendió la búsqueda de la aeronave. Al día siguiente localizaron la aeronave en el lugar llamado Pinujijay; sus ocupantes estaban muertos.
25 de mayo 1956
Un avión propiedad de Aviateca fue dado por perdido luego de que realizaba el vuelo de Puerto Barrios a La Tinta, Alta Verapaz. Llevaba a bordo a 28 pasajeros y en la tripulación al coronel Salvador Cóbar, quien era el piloto; Alberto Villagrán era el copiloto, María Teresa Abugarade era la sobrecargo.
El piloto indicó a la torre de control que no podía aterrizar en la Tinta debido al mal tiempo y que se dirigía al Aeropuerto La Aurora. Al pasar las horas y no tener noticias del avión se dio la orden para la búsqueda.
Patrullas de rescate localizaron los restos del avión TG-AHA, de Aviateca, en el cerro Paxón, ubicado en la Sierra Las Minas. En este percance murieron 31 pasajeros, según informo el director de Aeronáutica Civil, Carlos Cheesman.
Un matrimonio
El caso más dramático fue el de Hilda Meschade, una joven de 19 años quien viajaba a Puerto Barrios en compañía de su madre, Mercedes Meschade para asistir a una despedida de soltera que le daba el personal del hospital infantil, pues el día siguiente contraería matrimonio con el médico Roberto Rendón.
Otras de las víctimas fueron Federico García, líder empresario de Alta Verapaz, así como el experimentado piloto de la aeronave siniestrada teniente coronel Salvador Cóbar, quien iba a ser padre de su primer hijo.
Accidente de un helicÓpeto militar en Petén. (Video: tomado de You Tube)